7 de abril de 2009

La media cobija



Don Roque era ya un anciano cuando murió su esposa, durante largos años había trabajado con ahínco para sacar adelante a su familia. Su mayor deseo era ver a su hijo convertido en un hombre de bien, respetado por
los demás, ya que para lograrlo dedicó su vida y su escasa fortuna.

A los 70 años Don Roque se encontraba sin fuerzas, sin esperanzas, solo y lleno de recuerdos. Esperaba que su hijo, brillante profesionista, le ofreciera su apoyo y comprensión, pero veía pasar los días sin que este apareciera y decidió por primera vez en su vida pedir un favor a su hijo.

Don Roque tocó la puerta de la casa donde vivía su hijo con su familia.
-¡Hola papá! ¡Que milagro que vienes por aquí!
- Ya sabes que no me gusta molestarte, pero me siento muy solo, además estoy
cansado y viejo.
- Pues a nosotros, nos da mucho gusto que vengas a visitarnos, ya sabes que
esta es tu casa.
- Gracias hijo, sabía que podía contar contigo, pero temía ser un estorbo.
- Entonces ¿no te molestaría que me quedara a vivir con ustedes? ¡me siento tan
solo!
-¿Quedarte a vivir aquí?, si…..claro……pero no se si estarías a gusto, tu sabes,
la casa es chica mi esposa es muy especial…..y luego los niños….
- Mira hijo, si te causo muchas molestias olvídalo, no te preocupes por mi,
alguien me tenderá la mano.
- No padre no es eso, solo que….no se me ocurre dónde podrías dormir. No puedo
sacar a nadie de su cuarto, mis hijos no me lo perdonarían….o solo que no te
moleste dormir en el patio?
- Dormir en el patio esta bien.
- El hijo de Don Roque llamó a su hijo Luis de 12 años.
- Dime papá.
Mira hijo, tu abuelo se quedará a vivir con nosotros. Tráele una cobija para
que se tape en la noche.
- Si con gusto….¿y donde va a dormir?
-En le patio, no quiere que nos incomodemos por su culpa.
Luis subió por la cobija, tomó unas tijeras y la cortó en dos. En ese momento
llegó su padre
-¿Que haces Luis? ¿porque cortas la manta de tu abuelo?
- Sabes papá, estaba pensando…..
-¿Pensando en que?
- En guardar la mitad de la cobija para cuando tu seas viejo y vayas a vivir a
mi casa.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

ESTA HISTORIA LES PUDE PASAR A CUALQUIER ENVIDIOSO CON SUS PAPAS

Anónimo dijo...

Cuando lo lei por primera vez me quede sorprendido por el mensaje que te deja sin que al inicio lo esperes asi. Seguro que reflexionas al leerlo.