29 de diciembre de 2012

La viejita malhumorada



¿Qué ven hermanas? ¿Qué ven? ¿Qué piensan cuando me miran?

Una vieja malhumorada, no demasiado inteligente, de costumbres inciertas, con sus ojos soñadores fijos en la lejanía.

La vieja que escupe la comida y no contesta cuando tratan de convencerla “Dele, haga un pequeño esfuerzo”

La viejita, quien ustedes creen que no se da cuenta de las cosas que ustedes hacen y que continuamente pierde el guante o el zapato. La viejita, quien contra su voluntad, pero mansamente les permite que hagan lo que quieran, que la bañen y alimenten, sólo para que así pase el largo día.

¿Es eso lo que piensan? ¿Es eso lo que ven? Si es así, abran los ojos, hermanas, porque esto que ustedes ven ¡no soy yo!

Les voy a contar quién soy, cuando aquí estoy sentada tan tranquila, tal como me ordenan, cuando como por orden de ustedes. Soy una niñita de diez años que tiene padre y madre, hermanos y hermanas, que se aman.

Soy una jovencita de dieciséis años, con alas en los pies, que sueña que pronto encontrará a su amado. Soy una novia a los veinte, mi corazón da brincos, cuando hago la promesa que me ata hasta el fin de mi vida. Ahora tengo veinticinco, tengo mis hijos, quienes necesitan que los guíe, tengo un hogar seguro y feliz.

Soy mujer a los treinta, los hijos crecen rápido, estamos unidos con lazos que deberían durar para siempre. Cuando cumplo cuarenta mis hijos ya crecieron y no están en casa, pero a mi lado está mi esposo que se ocupa de que yo no esté triste.

A los cincuenta, otra vez, sobre mis rodillas juegan los bebés, de nuevo conozco a los niños, a mis seres amados y a mí. Sobre mí se ciernen nubes oscuras, mi esposo ha muerto, cuando veo el futuro me erizo toda de terror.

Mis hijos se alejan, tienen a sus propios hijos, pienso en todos los años que pasaron y en el amor que conocí. Ahora soy una vieja. Qué cruel es la naturaleza! La vejez es una burla que convierte al ser humano en un alienado. El cuerpo se marchita, el atractivo y la fuerza desaparecen, allí, donde una vez tuve el corazón ahora hay una piedra.

Sin embargo, dentro de estas viejas ruinas todavía vive la jovencita. Mi fatigado corazón, de vez en cuando, todavía sabe rebosar de sentimientos.

Recuerdo los días felices y los tristes. En mi pensamiento vuelvo a amar y vuelvo a vivir mi pasado. Pienso en todos esos años que fueron demasiado pocos y pasaron demasiado rápido, y acepto el hecho inevitable que nada puede durar para siempre.

Por eso, gente, abran sus ojos, abran sus ojos y vean! Ante ustedes no está una vieja malhumorada ante ustedes ¡¡Estoy YO!!
Recuerden este poema la próxima vez que se encuentren con una persona mayor y a quien tal vez esquiven, sin mirar primero su alma joven. Todos vamos a estar algún día en su lugar

Nunca se olviden de los viejos malhumorados

¿Adolescencia? ¿Que es eso?



Recuerdo que de pequeña quería crecer, ser adolescente, sentirme bonita, lucir los mejores vestidos y tacones, hoy que lo soy nada me haría más feliz que volver a ser una niña pequeña.

Es que en realidad son demasiados cambios en poco tiempo; es ver a tus padres como personas que te privan de la “diversión” cuando antes los veías como unos héroes.

Es ver a la persona que te gusta y sentir que se te sale el corazón o peor aun ¡las hormonas! Cuando antes te parecía asqueroso ver a personas besarse.

O sentir que nadie te entiende y pensar “Si supieran lo difícil que es mi vida”

O bien estar tan frustrado que ni tu mismo te logras entender; ¿Qué me pasa? Te preguntas, descubres cosas muy nuevas y surge la pregunta del “¿Qué van a pensar de mi?”

Querido adolescente…

¡VIVE! Eres joven más no adulto. Aun eres casi un niño, cuídate como tal

¡DISFRUTA! Si te la vives pensando en el querer tener a todo el mundo contento debes entender que eso JAMAS lo lograras ¡se tu mismo!

¡PIENSA! Si ya lo sé, lo único que quieres es “divertirte” pero no seas tonto, hay errores que no se arreglan, si tan adulto te crees piensa como tal; ¡con madurez!

¡VALORA! A tus padres y a los pocos verdaderos amigos

¡NO TE PASES! Te apuesto que tienes menos de 18 años, ósea una hermosa y larga vida por delante, no la quieras echar a perder enredándote en la droga o en cualquier otra cosa estúpida que solo terminara por destruirte.

Pero sobre todo ¡CUIDATE! Por favor no te quieras sentir el “Niño grande” ¡NO LO ERES! Entiende no vas a crecer ni mucho menos a madurar por beber hasta ponerte borracho, ni por fumar, ni por drogarte, mucho menos te harás mas mujer o mas hombre teniendo sexo; la madurez se mide desde otro punto muy diferente…

¡Niño! ¡Niña! Disfruta esta etapa que es maravillosa, no la eches a perder de un día para otro; recuerda que todo a su tiempo…

Aracely Sarahy Orozco Aranda 
3° A t/m Generación 2010-2013 
Escuela Secundaria Técnica 85 Tonalá, Jalisco

31 de octubre de 2012

La tacita


Se cuenta que una vez en Inglaterra, existía una pareja que gustaba de visitar las pequeñas tiendas del centro de Londres. Una de esas tiendas era una en donde vendían vajillas antiguas.
En una de sus visitas a la tienda vieron una hermosa tacita.
- “¿Me permite ver esa taza?” Preguntó la señora, “¡nunca he visto nada tan fino!.
En cuanto tuvo en sus manos la taza, escuchó que la tacita comenzó a hablar.
- Usted no entiende – Yo no siempre he sido esta taza que usted esta sosteniendo. Hace mucho tiempo yo era solo un montón de barro. Mi creador me tomo entre sus manos y me golpeó y me amoldó cariñosamente.
Luego llegó el momento en que me desesperé y le grité:
“Por favor”. ¡Déjame ya en paz!.
Pero mi amo sólo me sonrió y me dijo: ..
- ”Aguanta un poco más, todavía no es tiempo.”
Después me puso en un horno. Yo nunca había sentido tanto calor… Me pregunté por qué mi amo querría quemarme, así que toqué la puerta del horno.
A través de la ventana del horno pude leer los labios de mi amo que me decían:
- “Aguanta un poco más, todavía no es tiempo.”
Finalmente se abrió la puerta, mi amo me tomó y me puso en una repisa para que me enfriara.
- “Así está mucho mejor”, me dije a mi misma; pero apenas me había refrescado, cuando mi creador ya me estaba cepillando y pintando. El olor a la pintura era horrible, ¡sentía que me ahogaría!.
- ”Por favor detente”, le gritaba yo a mi amo.
Pero él solo movía la cabeza haciendo un gesto negativo y decía:
- “Aguanta un poco más, todavía no es tiempo.”
Al fin mi amo dejó de pintarme; pero, esta vez me tomó y me metió nuevamente en otro horno. No era un horno como el primero; sino que era mucho más caliente.
Ahora sí estaba segura que me sofocaría. Le rogué, y le imploré a mi amo que me sacara. Grité, lloré; pero mi creador sólo me miraba diciendo:
- “Aguanta un poco más, todavía no es tiempo”.
En ese momento me di cuenta que no había esperanza. Nunca lograría sobrevivir a ese horno. Justo cuando estaba a punto de darme por vencida se abrió la puerta y mi amo me tomó cariñosamente y me puso en una repisa que era aun más alta que la primera. Allí me dejó un momento para que me refrescara.
Después de una hora de haber salido del segundo horno, mi amo me dio un espejo y me dijo:
- “Mírate” “¡Esta eres tú!”
¡Yo no  podía creerlo! ¡Esa no podía ser yo! Lo que veía era hermoso.
Mi amo nuevamente me dijo:
- “Yo sé que te dolió haber sido golpeada y amoldada por mis manos; pero si te hubiera dejado como estabas, te hubieras secado. Sé que te causó mucho calor y dolor estar en el primer horno, pero de no haberte puesto allí, seguramente te hubieras estrellado.
También sé que los gases de la pintura te provocaron muchas molestias, pero de no haberte pintado tu vida no tendría color. Y si no te hubiera puesto en el segundo horno, no hubieras sobrevivido mucho tiempo, porque tu dureza no habría sido la suficiente para que subsistieras.
“¡Ahora tú eres un producto terminado!” “¡Eres lo que imaginé cuando te comencé a formar!”.
Anónimo

19 de octubre de 2012

Los irresponsables

Hoy les quiero comentar sobre un tema que me ha impactado bastante, desde que llegue a Costa Rica, porque esta situación, como u9618530273px esta expandida a todos los niveles jos, están haciendo de las suyas los irresponsables , porque ya es una practica muy habitual, que los patrones, al final de la semana, con un rostro mas fresco que una lechuga a las 6 de la mañana, le comuniquen a sus trabajadores que no tienen "plata", para pagarles el salario, y luego les exponen las excusas mas absurdas que se puedan imaginar.

Esta situación me resulto traumática desde el principio y todavía hoy no entiendo como es posible que sucedan ne-height: 18.899999618530273px;">
Pero hasta en los niveles mas bajos, están haciendo de las suyas los irresponsables , porque ya es una practica muy habitual, que los patrones, al final de la semana, con un rostro mas fresco que una lechuga a las 6 de la mañana, le comuniquen a sus trabajadores que no tienen "plata", para pagarles el salario, y luego les exponen las excusas mas absurdas que se puedan imaginar.

Esta situación me resulto traumática desde el principio y todavía hoy no entiendo como es posible que sucedan estas cosas, porque siempre tuve claro que esa acción era el resultado de una ecuación muy simple yo trabajo= tu pagas, así de sencillo, quizás me cuesta mas trabajo asimilarlo porque vengo de un país donde me acostumbraron a recibir puntualmente lo que me correspondía, porque allí el salario de los trabajadores es sagrado, como debe ser, porque ese derecho elemental de cobrar el salario por cada jornada laboral trabajada pienso que debe ser respetado.

Es realmente muy incomodo, tener que convivir con personas tan irresponsables, porque son las encargadas, entre otras, de complicarnos la vida. Pienso que los padres debemos jugar un papel mas activo en ese sentido, porque es nuestro deber enseñarles a nuestros hijos desde pequeños, los hábitos y costumbres que los lleven a adquirir una formación adecuada.

Si por ejemplo, cada vez que los muchachos dejan la ropa tirada, la mamita viene detrás para ponerla en su lugar, lejos de ayudarlos, les están haciendo daño, porque si los acostumbramos a no tener obligaciones, solo se convertirán en unos irresponsables, como es el caso de una señora que conozco que ya rebasa los 50 años y aun su esposo debe despertarla cada mañana para que vaya al trabajo, porque de otra manera la señora se queda dormida; o como aquel compañero que no logra llegar temprano a ninguna cita y siempre tiene un pretexto para justificarse, o como aquellos y/o aquellas, que hacen el amor con cualquiera, sin utilizar ningún tipo de protección. Bueno, ejemplos de irresponsables creo que hay muchisimos para enumerar y que son bien conocidos por todos, pero insisto en que lo mas importante esta', en la formación que otorguemos a nuestros hijos, porque después que se conviertan en unos informales, ya queda poco por hacer y la tarea se complica mas, porque como cualquier tendencia negativa, para evitar que prospere, hay que tomar medidas a tiempo, es decir, desde que los niños son pequeños, pero en este aspecto creo que lo fundamental, es tratar de no imponerles por la fuerza un tipo de conducta, sino que debemos educarlos dándoles buenos ejemplos, porque como dice el refrán: "el niño hace mas lo que ve hacer, que lo que le dicen que haga"

27 de septiembre de 2012

La onda verde


En la fila del supermercado, el cajero le dijo a una señora mayor que debería traer su propia bolsa de compras ya que las bolsas plásticas no eran buenas para el medio ambiente. 

La señora pidió disculpas y explicó: “Es que no había esta onda verde en mis tiempos”. 

El empleado le contestó: “Ese es nuestro problema ahora. Su generación no tuvo suficiente cuidado para preservar nuestro medio ambiente.”

Tenía razón, nuestra generación no vivía la onda verde en esos tiempos. En aquel entonces, las botellas de leche, las botellas de gaseosas y las de cerveza se devolvían a la tienda. La tienda las enviaba de nuevo a la planta para ser lavadas y esterilizadas antes de llenarlas de nuevo, de manera que podían usar las mismas botellas una y otra vez. Así, realmente las “reciclaban”. Pero no teníamos onda verde en nuestros tiempos.

Subíamos las gradas, porque no había escaleras mecánicas en cada comercio y oficina. Caminábamos al almacén en lugar de montar en nuestro vehículo de 300 caballos de fuerza cada vez que necesitábamos recorrer dos cuadras. Pero tenía razón, no teníamos la onda verde en nuestros días.

Por entonces, lavábamos los pañales de los bebés porque no había desechables. Secábamos la ropa en tendederos, no en esas máquinas consumidoras de energía sacudiéndose a 220 voltios, la energía solar y eólica secaban verdaderamente nuestra ropa. Los chicos usaban la ropa de sus hermanos mayores, no siempre modelitos nuevos. Pero esa señora está en lo cierto: no teníamos una onda verde en nuestros días.

En ese entonces teníamos una televisión, o radio, en la casa, no un televisor en cada habitación. Y la TV tenía una pantallita del tamaño de un pañuelo (¿se acuerdan?), no una pantallota del tamaño de un estadio.

En la cocina, molíamos y batíamos a mano, porque no había máquinas eléctricas que lo hagan todo por nosotros. Cuando empacábamos algo frágil para enviarlo por correo, usábamos periódicos arrugados para protegerlo, no plastoformos o bolitas plásticas.

En esos tiempos no encendíamos un motor y quemábamos gasolina sólo para cortar el pasto. Usábamos una podadora que funcionaba a músculo. Hacíamos ejercicio trabajando, así que no necesitábamos ir a un gimnasio para correr sobre pistas mecánicas que funcionan con electricidad. Pero ella está en lo cierto: no había en esos tiempos una onda verde.

Bebíamos de una fuente cuando teníamos sed, en lugar de usar vasitos o botellas de plástico cada vez que teníamos que tomar agua. Recargábamos las plumas con tinta, en lugar de comprar una nueva y cambiábamos las hojillas de afeitar en vez de echar a la basura toda la afeitadora sólo porque la hoja perdió su filo. Pero no teníamos una onda verde por entonces.

En aquellos tiempos, la gente tomaba el tranvía o un ómnibus y los chicos iban en sus bicicletas a la escuela o caminaban, en lugar de usar a la mamá como un servicio de taxi de 24 horas. Teníamos un enchufe en cada habitación, no un banco de enchufes para alimentar una docena de artefactos. Y no necesitábamos un aparato electrónico para recibir señales de satélites a kilómetros de distancia en el espacio para encontrar la pizzería más próxima.

Así que ¿no les parece lamentable que la actual generación esté lamentándose cuán botarates éramos los viejos por no tener esta onda verde en nuestros tiempos?

21 de agosto de 2012

El abuelo

Había una vez, en un pequeño pueblo de algún lugar de Oriente vivía un señor con cuatro hijos, el menor de los cuales tenía, en el momento de esta historia, alrededor de 30 años, Para ese entonces sus hermanos tenían 35, 37 y 40 años. El padre tenía algo más de sesenta pero como en esa época el promedio de vida rondaba por los 40 años, era prácticamente un anciano y por lo tanto tenía todos los problemas propios de la senectud. Su cabeza, su cuerpo, sus esfínteres, su capacidad para valerse por sí mismo, nada de esto funcionaba bien en el viejo.

Un día el hijo más joven se caso y se fue de la casa. Se generó entonces un gran problema: el padre se quedaría solo. La madre había muerto a causa del último parto y los otros hermanos ya estaban casados. En consecuencia, no había nadie que pudiera hacerse cargo de este viejo, con el agravante que no eran épocas en las que hubiera asilos ni dinero para pagarle a alguien que se ocupara de cuidarlo.

Los hijos empezaron a sentir que, pese al amor que le tenían, el padre era una complicación. No era posible que ninguno de ellos se llevara al padre a vivir con a su casa para hacerse cargo de él.

Así es que los hijos tenían verdaderamente un serio problema. El cuento comienza con los hijos reunidos conversando acerca de cuál será el futuro del padre. En un momento dado, se les ocurre que podrían turnarse. Pero pronto advierten que esa situación no será suficiente y, además que significa un gran costo para sus vidas. Y entonces, casi sin darse cuenta empiezan a pensar que la lo mejor que les puede pasar es que el padre muera. Pese al dolor que implicaba para ellos ese reconocimiento´, pronto advirtieron que no podían sólo esperar que esto sucediera, porque el padre podría vivir muchos años más en aquella situación. Pensaron también, que ninguno de ellos podría soportar la demora.

Y entonces misteriosamente, a uno de ellos se le ocurrió que, quizá lo único que habría que hacer era esperar que llegara el invierno. Quizá el invierno terminaría con él. Y fue así como imaginaron que si entraban e el bosque con su padre y el padre se perdía, el frio y los lobos harían el resto...

Lloraron por esto, pero asumieron que tenían que hacer algo por el resto de sus vidas y se organizaron para cuidar al padre hasta llegar el invierno.

Después de la primera nevada, que fue especialmente intensa, los cuatro hermanos se reunieron en la casa.

Le dijeron al padre:

-Ven papá, vístete que vamos a salir.

-¿Salir, con la nieve? -pregunto el padre sin comprender. Pero los hijos dijeron:

-Sí, si, sí vamos.

El padre sabía que su cabeza no estaba funcionando bien últimamente, así que decidió acatar con sumisión lo que sus hijos le decían. Lo vistieron, casi irónicamente lo abrigaron mucho y se fueron rumbo al bosque.

Una vez allí, comenzaron a buscar un lugar para abandonarlo y desaparecer rápidamente. Se introdujeron en el bosque, cada vez más profundo hasta que en un momento dado, llegaron a un claro. De pronto el padre dijo:

-Es acá.

-¿Qué? -preguntaron asombrados los hijos.

-Es acá. repitió el anciano.

Supuestamente, el padre no tenía la lucidez suficiente para darse cuenta de lo que estaba ocurriendo. Por otro lado, ellos se habían cuidado muy bien de no decirlo. ¿A qué se refería el padre?

-Acá, acá, éste es el lugar -insistió.

Entonces los hijos le preguntaron:

-Qué lugar? Papá.... ¿qué lugar?

Y el padre respondió.

-Este es el lugar donde, hace veinticinco años, abandoné a mi papá.

ESTA ES LA HISTORIA DE LA EDUCACION, PARA BIEN O PARA MAL. PORQUE VAMOS A HACER CON NUESTROS PADRES LO QUE ELLOS NOS ENSEÑARON QUE SE HACE CON LOS PADRES. DEL MISMO MODO, NUESTROS HIJOS VAN A HACER CON NOSOTROS LO QUE NOSOTROS HICIMOS CON NUESTROS PADRES.

... si vivo diciendo de mí: ...que trabajo en lo que no me gusta, que la vida es desastrosa, que no valgo nada, que estoy enojado, si vivo faltándome al respeto a mí mismo, no sintiéndome orgulloso, sintiéndome esclavo de la vida que llevo y tengo una AUTOESTIMA muy baja ¿cómo puedo pretender que mi hijo se sienta valioso, si es el hijo de uno que no vale?

En suma la mejor manera de ayudar a mi hijo a que tenga su autoestima preservada es, primero dándole ese valor......... SOLO SI UNO SE SIENTE VALIOSO PUEDE TRANSMITIRLE A UN HIJO LO QUE SIGNIFICA SENTIRSE VALIOSO "

6 de agosto de 2012

¿POR QUE LOS PERROS SE MUEREN PRONTO?




Te has preguntado por qué los perros viven menos que las personas???
Aquí la respuesta (por un niño de 6 años).

Siendo un Veterinario, fui llamado para examinar a un Sabueso Irlandés de 10 años de edad llamado Belker.

Los dueños del perro, Ron, su esposa Lisa y su pequeño Shane, estaban muy apegados a Belker, y estaban esperando un milagro.

Examine a Belker y descubrí que estaba muriendo de Cáncer.

Le dije a su familia que no podíamos hacer ya nada por Belker, y me ofrecí para llevar cabo el procedimiento de eutanasia en su casa.

Hicimos los arreglos necesarios, Ron y Lisa dijeron que sería buena idea que el niño de 6 años, Shane observara el suceso.

Ellos sintieron que Shane podría aprender algo de la experiencia.

Al día siguiente, sentí la familiar sensación en mi garganta cuando Belker fue rodeado por la familia.

Shane se veía tranquilo, acariciaba al perro por última vez, y yo me preguntaba si él comprendía lo que estaba pasando.

En unos cuantos minutos Belker se quedó dormido pacíficamente para ya no despertar.

El pequeño niño pareció aceptar la transición de Belker sin ninguna dificultad o confusión.

Nos sentamos todos por un momento preguntándonos el porqué del lamentable hecho de que la vida de las mascotas sea más corta que la de los humanos.

Shane, que había estado escuchando atentamente, dijo: ''Yo sé por qué.''
Sorprendidos, todos volteamos a mirarlo.

Lo que dijo a continuación me maravilló, nunca he escuchado una explicación más reconfortante que ésta.

Este momento cambio mi forma de ver la vida.

Él dijo: ''La gente viene al mundo para poder aprender cómo vivir una buena vida, como amar a los demás todo el tiempo y ser buenas personas, verdad?... Bueno, como los perros ya saben cómo hacer todo eso, pues no tienen que quedarse por tanto tiempo como nosotros.'' La moraleja es :

Si un perro fuera tu maestro, aprenderías:
- Cuando tus seres queridos llegan a casa, siempre corre a saludarlos.
- Nunca dejes pasar una oportunidad para ir a pasear.
- Deja que la experiencia del aire fresco y del viento en tu cara sea de puro Éxtasis.
- Toma siestas.
- Estírate antes de levantarte.
- Corre, brinca y juega a diario.
- Mejora tu atención y deja que la gente te toque.
- Evita morder cuando un simple gruñido sería suficiente.
- En días cálidos, recuéstate sobre tu espalda en el pasto, patas abiertas.
- Cuando haga mucho calor, toma mucha agua y recuéstate bajo la sombra de un árbol.
- Cuando estés feliz, baila alrededor, y mueve todo tu cuerpo.
- Deléitate en la alegría simple de una larga caminata.
- Sé leal.
- Nunca pretendas ser algo que no eres.
- Si lo que quieres está enterrado, escarba hasta que lo encuentres.
- Cuando alguien tenga un mal día, quédate en silencio, siéntate cerca y suavemente hazles sentir que estás ahí.

"La felicidad no es una meta sino un camino...disfrútala mientras la recorres"

"Mas vale perder el tiempo con los amigos....
Que perder amigos con el tiempo....
Por éste BUEN motivo, pierdo el tiempo contigo....
Porque NO quiero perderte con el tiempo".... guau!!!

1 de agosto de 2012

Para un amigo



No puedo darte soluciones para todos los problemas de la vida, ni tengo respuestas para tus dudas o temores, pero puedo escucharte y buscarlas junto a ti.

No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro.
Pero cuando me necesites, estaré allí.

No puedo evitar que tropieces.
Solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.

Tus alegrías, tu triunfo y tus éxitos no son míos.
Pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz.

No juzgo las decisiones que tomas en la vida.
Me limito a apoyarte, a estimularte y a ayudarte si me lo pides.

No puedo impedir que te alejes de mí.
Pero si puedo desearte lo mejor y esperar a que vuelvas.

No puedo trazarte límites dentro de los cuales debas actuar, pero sí te ofrezco el espacio necesario para crecer.

No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parte el corazón, pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para armarlo de nuevo.

No puedo decirte quién eres ni quién deberías ser.
Solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo.

En estos días ore por ti...
En estos días me puse a recordar a mis amistades más preciosas.

Soy una persona feliz: tengo más amigos de lo que imaginaba.

Eso es lo que ellos me dicen, me lo demuestran.

Es lo que siento por todos ellos.

y la alegría que sienten al verme.

Y yo también siento paz y alegría cuando los veo
y cuando hablamos, sea en la alegría o sea en la serenidad, en estos días pensé en mis amigos y amigas
y, entre ellos, apareciste tú.

No estabas arriba, ni abajo ni en medio.

No encabezabas ni concluías la lista.

No eras el número uno ni el número final.

Lo que sé es que te destacabas por alguna cualidad
que transmitías y con la cual desde hace tiempo
se ennoblece mi vida.

Y tampoco tengo la pretensión de ser el primero,
el segundo o el tercero de tu lista.
Basta que me quieras como amigo.
y le agradecí a Dios que me haya dado la oportunidad
de tener un amigo como tú.
Era una oración de gratitud: Tú has dado valor a mi vida...
y le agradecí a Dios que me haya dado la oportunidad
de tener un amigo como tú.
Era una oración de gratitud: Tú has dado valor a mi vida...
 


Borges

22 de julio de 2012

Padres, hijos, afecto



A veces, no sé ni qué pensar.  Durante estos días ha habido problemas en diferentes colegios. Peleas entre jóvenes y más grave, entre niñas y en muchos casos, por problemas sencillos, simples, solucionables. Estudiantes con armas en sus mochilas.

En estos días, tuve charla con un padre de familia quien me dijo que quería a su hija, pero que ella, a su edad, debía hacer lo que él le indicaba. Que soñaba que su hija trabajara y no que pensara en viajar al exterior.

Dos niñas de 13 años cada una, huyeron de su hogar porque una de las madres había amenazado con pegarle a una de ellas, si llegaba tarde a casa.

Por miedo, se fueron. Un amigo me llamó a pedirme que colaborara en este caso. Fuimos a casa de una de las familias, hablé con la madre y me dijo que nada había pasado. Que se le hacía extraño que su hija hubiera huido de la casa. No se explicaba. Le pregunté que si ella abrazaba a su hija, me dijo que no. Que casi nunca lo hacía. Que si le daba mucho afecto y me dijo que muy poco. Que le era muy difícil. Allí estaba la abuela de la niña y le pregunté que si ella la había abrazado alguna vez. La señora empezó a llorar y me dijo que su madre nunca le había dado un abrazo.

Ahí, comprendí muchas cosas.

Le dije que, por favor, no castigara a su hija. La íbamos a encontrar, pero que el compromiso debería ser de abrazos y mucho afecto. Que mirara por el panorámico y no por el retrovisor. Me dijo que quería internar a su hija y le pedí que no hiciera eso, porque era peor. Que como era hija única, debería tenerla cerca, hablar con ella, sentirla.

Luego, hablé con la Policía de infancia y adolescencia, quienes estuvieron dispuestos a colaborar. Periodistas amigos,  también se dispusieron a informar. Decidí acompañar a mi amigo, porque me pidió que fuésemos a buscarlas. Con base en algunos datos, localizamos lugares en los cuales podrían estar.

Al finalizar la tarde, logramos ubicarlas. La lluvia no impidió que las siguiéramos por el barrio al cual llegamos, incluyendo una patrulla de la policía de infancia y adolescencia.

Cuando nos acercamos, una de ellas empezó a llorar intensamente. “No quiero ir a mi casa”, “no quiero que mi mamá me vuelva a pegar”. Yo la abracé y me comprometí con ella.

Nada le iba a pasar.

Como a las nueve de la noche, nos reunimos con las dos familias. Conversamos. Les hablé acerca del afecto. Que esa palabra debía convertirse en realidad. Que entre padres e hijos, el afecto era muy importante.

Cada madre le habló a su hija. Cada hija respondió. Hubo lágrimas y abrazos. Hubo perdón y se mostró el amor entre ellas.

Regresé a casa, convencido de que había hecho algo por dos familias.

Seguiré insistiendo en los abrazos, caricias y afecto entre padres e hijos.

Mientras haya mucho afecto, habrá una relación más cercana, más diálogo y más alegría entre padres e hijos.

Manuel Gómez S

La historia del niño Herbert

En una cena de beneficencia para una escuela de niños con capacidades especiales, el padre de un ex-alumno tomo la palabra y después de felicitar y exaltar a la escuela y a todos los que trabajan en ella, el hombre, continùo diciendo:
'Cuando no hay agentes externos que interfieran con la naturaleza, el orden natural de las cosas alcanza la perfección'.

Pero mi pequeño... mi hijo Beto, no puede aprender como otros niños lo hacen....... No puede entender las cosas como otros niños........... 
¿Donde está el orden natural de las cosas en mi hijo?

La audiencia quedó impactada por la pregunta.

El padre del niño Continuó diciendo:
'He visto que cuando un niño como èl, física y mentalmente discapacitado viene al mundo......
Una oportunidad de ver la naturaleza humana se presenta, y se manifiesta en la forma en la que otras personas tratan a ese niño'.

Entonces contó que un día caminaba con su hijo Beto cerca de un parque donde algunos niños jugaban baseball. El pequeño le preguntó a su padre: 

'¿Crees que me dejen jugar?'

Su padre sabia que a la mayoría de los niños no les gustaría que alguien como Beto jugara en su equipo....
Pero el padre también entendió que si le permitían jugar a su hijo, le darían un sentido de pertenencia muy necesario y la confianza de ser aceptado por otros a pesar de sus habilidades especiales.

El padre se acercó a uno de los niños que estaban jugando y le preguntó (sin esperar mucho) si Beto podría jugar.

El niño miró alrededor por alguien que lo aconsejara y le dijo: Estamos perdiendo por seis carreras y el juego esta en la octava entrada. Supongo que puede unirse a nuestro equipo y trataremos de ponerlo al bate en la novena entrada'.

Beto se desplazó con dificultad hasta la banca y con una amplia  sonrisa, se puso la camisa del equipo mientras su padre lo contemplaba con lágrimas en los ojos por la emoción.
Los otros niños vieron la felicidad del padre cuando su hijo era aceptado.

Al final de la octava entrada 'su equipo' logró anotar algunas carreras pero aún estaban detrás en el marcador por tres. 

Al inicio de la novena entrada, Beto se puso un guante y jugó en el jardín derecho.

Aunque ninguna pelota llegó a el, estaba extasiado solo por estar en el juego y en el campo, sonriendo de oreja a oreja mientras su padre lo animaba desde las graderías.
 
Al final de la novena entrada, 'su equipo' anotò de nuevo. Ahora con dos 'outs' y las bases llenas la carrera para obtener el triunfo era una  posibilidad y Beto era el siguiente en batear.

Con esta oportunidad, ¿Lo dejarían batear y renunciar a la posibilidad de ganar el juego? ¡Sorprendentemente, Beto estaba al bate!

Todos sabían que aunque fuera solo un solo 'hit' era imposible, no sabia ni como agarrar el bate correctamente, mucho menos pegarle a la bola. 

Sin embargo, mientras Beto se paraba sobre la base, el 'pitcher', reconoció que el otro equipo estaba dispuesto a sacrificarse perdiendo para permitirle a Beto un gran momento en su vida.......
Se movió unos pasos al frente y tiro la bola muy suavemente..........!   El primer tiro llegó, Beto abanicó torpemente y falló....!

El 'pitcher' de nuevo se adelantó unos pasos para tirar la bola suavemente hacia el bateador. 

Cuando el tiro se realizó Beto abanicó y golpeó la bola suavemente justo enfrente del 'pitcher'..........!

El juego podría haber terminado...... El 'pitcher' podría haber recogido la bola y tocarlo......
Beto hubiera quedado fuera y habría sido el final del juego....... 

Pero, ¡El 'pitcher' tiró la bola sobre la cabeza del niño en primera base.....!
¡Fuera del alcance del resto de sus compañeros de equipo!
¡Todos desde las graderías y los jugadores de ambos equipos empezaron a gritar...! 
Beto corre a primera base, como nunca en su vida había corrido esa distancia y lo logra!....... Corrió justo sobre la línea, con los ojos muy abiertos y sobresaltado.

Todos gritaban, '¡Corre a segunda!' recobrando el aliento, Beto con dificultad corrió hacia la segunda base. 

Para el momento en que Beto llegó a segunda base el niño del jardín derecho tenia la bola...
el niño mas pequeño en el equipo y que sabia que tenia la  oportunidad de ser el héroe del día.
El podía haber tirado la bola a segunda base, pero entendió las intenciones del 'pitcher' y tiro la bola alto, sobre la cabeza del niño en tercera base. 
Beto corrió a tercera base mientras que los corredores delante de él hicieron un círculo alrededor de la base.

Cuando Beto llegó a tercera, los niños de ambos equipos, y los espectadores, estaban de pie gritando '¡corre a 'home'! corre'.

Beto corrió al 'home'..... Agotado, llegò y se paró en la base....Todos lo aplaudieron y fue vitoreado como el héroe que bateó el 'grand slam' y ganó el juego para su equipo.......!
 'Ese día', dijo el padre con lágrimas bajando por su rostro, 'los niños de ambos equipos ayudaron dándole a este mundo un trozo de verdadero amor y humanismo'.

El pequeño Beto, el heroe de aquel dìa, no sobrevivió otro verano. Murió ese invierno.....
¡Nunca olvidarè su esfuerzo...! ¡Verlo tan feliz......! ¡Haber llegado casa y ver a su  madre llorando de felicidad y abrazando a su hijo, el idolo de aquel juego!

Don Luis Castellanos

15 de mayo de 2012

Soy un maestro



Nací en el instante en que surgió una pregunta de la boca de un niño.

He sido muchas personas en muchos lugares:

Soy Sócrates animando a los jóvenes de Atenas a descubrir nuevas ideas a través de las preguntas.

Soy Anne Sullivan horadando los secretos del universo para ponerlos en la mano extendida de Helen Keller.

Soy Aesop y Hans Christian Andersen revelando la verdad por medio de innumerables narraciones.

Soy Marva Collins peleando por el derecho de todos los niños a la educación.

Soy Mary McCleod Bethune edificando una gran universidad para mi pueblo, usando cajones vacíos de naranjas como pupitres.

Soy Bel Kaufman luchando para ir en contra de la corriente.

Los nombres de quienes practicaron mi profesión han ganado el reconocimiento de la humanidad… Booker T. Washington, Buda, Confusio, Ralph Waldo Emerson, Leo Buscaglia, Moisés y Jesús.

Soy también aquellos cuyos nombres y rostros se han olvidado hace mucho tiempo, pero cuyas lecciones y carácter se recordarán siempre en los logros de sus alumnos.

He llorado de alegría en las bodas de los antiguos alumnos, he reído con regocijo en el nacimiento de sus hijos, y he permanecido con la cabeza inclinada por el dolor y la confusión en las tumbas cavadas demasiado pronto para cuerpos demasiado jóvenes.

En el transcurso de un día se me ha pedido ser actor, amigo, enfermero y médico, entrenador, hallador de objetos 
perdidos, prestamista, chofer de taxi, psicólogo, padre sustituto, vendedor, político y defensor de la fe.

Dejando a un lado los mapas, planos, fórmulas, verbos, historias y libros, no he tenido en realidad nada qué enseñar porque mis estudiantes han aprendido por sí mismos, y sé que se necesita el mundo entero para decirte quién eres.

Soy una paradoja. Hablo más alto cuando escucho más. Mis más grandes regalos son lo que quiero recibir, agradecidamente, de mis alumnos.

La riqueza material no es una de mis metas, pero soy un buscador de tesoros de tiempo completo, en mi búsqueda de nuevas oportunidades para que mis estudiantes puedan usar sus talentos, en mi constante búsqueda de esos talentos que a veces yacen enterrados en la autoderrota.

Soy el más afortunado de todos quienes trabajan.

A un médico se le permite traer una vida en un momento mágico. A mí se me permite que esa vida renazca día a a día con nuevas preguntas, ideas y amistades.

Un arquitecto sabe que si construye con cuidado, su estructura puede permanecer por siglos. Un maestro sabe que si construye con amor y verdad, lo que construya durará para siempre.

Soy un guerrero que batalla diariamente contra la presión de los amigos, de la negatividad, del temor, de la conformidad, de los prejuicios, de la ignorancia y de la apatía. Pero tengo grandes aliados: la inteligencia, la curiosidad, el apoyo de los padres, la individualidad, la creatividad, la fe, el amor y la risa, todos ellos me ayudan a levantar mi bandera con su apoyo insuperable.

¿Y a quién tengo que agradecer esta maravillosa vida que tengo la suerte de experimentar, sino a ustedes el público, los padres? 

Porque me han concedido el gran honor de confiarme su mayor contribución a la eternidad: sus hijos.

Y de esa menra tengo un pasado rico en recuerdos. Tengo un presente desafiante lleno de aventuras y entretenimiento, 
porque se me permite emplear mis días en el futuro.

Soy un maestro… y doy gracias a Dios por eso todos los días.

John W. Schlatter

3 de mayo de 2012

Miren qué bonito lo que dice sobre las mujeres.



Luis Fernando Veríssimo es un escritor brasileño que nació en Porto Alegre, el 26 de septiembre de 1936. Es hijo del escritor Érico Veríssimo. Durante su niñez vivió en Estados Unidos. Muchos de sus trabajos tienen un tono humorístico. Disfruta de la cultura de Río de Janeiro y es un gran crítico de la política de derecha.



El irrespeto por la naturaleza ha afectado la supervivencia de varios seres, y entre los más amenazados está la hembra de la especie humana.

Tengo apenas un ejemplar en casa, que mantengo con mucho celo y dedicación, pero en verdad creo que es ella la que me mantiene. Por lo tanto, por una cuestión de auto-supervivencia, lanzo la campaña “Salvemos a las mujeres”.

Tomen de acá mis pocos conocimientos sobre la fisiología de la feminidad, con el fin de que preservemos los raros y preciosos ejemplares que todavía quedan:

1. Hábitat:
La mujer no puede vivir en cautiverio. Si está enjaulada, huirá o morirá por dentro. No hay cadenas que las aten y las que se someten a la jaula pierden su DNA. Usted jamás tendrá la posesión sobre una mujer; lo que la va a atar a usted es una línea frágil que necesita ser reforzada diariamente.

2. Alimentación correcta:
Nadie vive de la brisa. Mujer vive de cariño. Déle en abundancia. Es cosa de hombre, y si ella no lo recibe de usted, lo buscará en otro. Besos matinales y un “yo te amo” al desayuno las mantienen bellas y perfumadas durante todo el día. Un abrazo diario es como el agua para los helechos. No la deje deshidratarse. Por lo menos una vez al mes es necesario, si no obligatorio, servirle un plato especial.

3. Flores:
También hacen parte del menú. Mujer que no recibe flores se marchita rápidamente y adquiere rasgos masculinos como la brusquedad y el trato áspero.

4. Respete la naturaleza:
¿No soporta la TPM (tensión pre-menstrual)? Cásese con un hombre. Las mujeres menstrúan, lloran por cualquier cosa, les gusta hablar de cómo les fue en el día, de discutir sobre la relación. Si quiere vivir con una mujer, prepárese para eso.

5. No restrinja su vanidad:
Es propio de la mujer hidratar las mechas, pintarse las uñas, echarse labial, estar todo un día en el salón de belleza, coleccionar aretes, comprarse muchos zapatos, pasar horas escogiendo ropas en un centro comercial. Comprenda todo esto y apóyela.

6. El cerebro femenino no es un mito:
Por inseguridad, la mayoría de los hombres prefiere no creer en la existencia del cerebro femenino. Por ello, buscan aquellas que fingen no tenerlo (y algunas realmente lo jubilaron). Entonces, aguante: mujer sin cerebro no es mujer, sino un simple objeto decorativo. Si usted está cansado de coleccionar estatuillas, intente relacionarse con una mujer.

Algunas le mostrarán que tienen más materia gris que usted. No les huya, aprenda con ellas y crezca. Y no se preocupe; al contrario de lo que ocurre con los hombres, la inteligencia no funciona como repelente para las mujeres.

7. No haga sombra sobre ella...
Si usted quiere ser un gran hombre tenga una mujer a su lado, nunca atrás. De esa forma, cuando ella brille, usted se bronceará. Sin embargo, si ella está atrás, usted llevará una patada en el trasero.

8. Acepte:
Mujeres también tienen luz propia y no dependen de nosotros para brillar. El hombre sabio alimenta los potenciales de su compañera y los utiliza para motivar los propios. Él sabe que, preservando y cultivando la mujer, él estará salvándose a sí mismo.

Mi amigo, si usted piensa que la mujer es demasiado costosa, vuélvase GAY.

¡Sólo tiene mujer quien puede!

16 de abril de 2012

Diferencias entre Padre, Papá y Papi


Hasta hace cosa de un siglo, los hijos acataban el cuarto mandamiento como un verdadero dictamen de Dios. Imperaban normas estrictas de educación: Nadie se sentaba a la mesa antes que el padre, nadie hablaba sin permiso del padre, nadie se levantaba de la mesa si Padre no se había levantado antes; por algo era el padre. La madre fue siempre el eje sentimental de la casa, el padre siempre la autoridad suprema.

Todo empezó a cambiar hace unas siete décadas, cuando el padre dejó de ser el padre y se convirtió en papá. El mero sustantivo era ya una derrota. Padre es una palabra sólida, rocosa, imponente; papá es un apelativo para oso de felpa o para perro faldero; da demasiada confianza. Además, con el uso de papá el hijo se sintió autorizado para protestar, cosa que nunca había ocurrido cuando el papá era el padre.

A diferencia del padre, el papá era tolerante. Permitía al hijo que fumara en su presencia, en vez de arrancarle los dientes con una trompada, como hacía el padre en circunstancias parecidas. Los hijos empezaron a llevar amigos a la casa y a organizar bailes y bebidas, mientras papá y mamá se desvelaban y comentaban en voz baja: Bueno, por lo menos tranquiliza saber que están tomándose unos tragos en casa y no en quién sabe dónde.

El papá marcó un acercamiento generacional muy importante, algo que el padre desaconsejaba por completo. Los hijos empezaron a comer en la sala mirando la tele, mientras papá y mamá lo hacían solos en la mesa.  Papá seguía siendo la autoridad de la casa, pero una autoridad bastante maltrecha. Era, en fin, un tipo querido; lavaba, planchaba, cocinaba y, además, se le podía pedir un consejo o también dinero prestado.

Y entonces vino papi. Papi es un invento reciente de los últimos 20 ó 30 años. Descendiente menguado y raquítico de padre y de papá, ya ni siquiera se le consulta ni se le pregunta nada. Simplemente se le notifica. Papi, me llevo el coche, dame para gasolina. Le ordenan que se vaya al cine con mami mientras los hijos están de fiesta. Lo tutean y hasta le indican cómo dirigirse a ellos: ¡Papi, no me vuelvas a llamar "chiquita" delante de Jonathan!

No sé qué seguirá después de papi. Supongo que la esclavitud o el destierro definitivo.  Yo estoy aterrado, después de haber sido nieto de padre, hijo de papá y papi de mis hijos, mis nietas han empezado a llamarme "pa"..........!!!

CREO QUE QUIEREN DECIR, ¡¡¿¿PA'QUÉ  SIRVES??!!

Reflexionemos

2 de abril de 2012

Sabes que estás llegando a la mediana edad


Tú sabes que estás llegando a la mediana edad cuando todo duele…o lo que no duele no funciona
Mediana edad es cuando tus años empiezan a aparecer en la cintura...y la cintura desaparece.
Mediana edad es cuando todavía tienes ganas pero ya no te acuerdas de qué.
Mediana edad es cuando deseas hacer gimnasia y te duermes esperando que se te pase el deseo.
Mediana edad es cuando tu médico te recomienda ejercicios al aire libre y tú te subes al auto y vas conduciendo con la ventanilla abierta.
Mediana edad es cuando comienzas a apagar las luces por economía y no para propiciar un acercamiento romántico ...
En la mediana edad, las cenas a luz de las velas dejan de ser románticas, ya que no consigues leer el menú.
Mediana edad es cuando en lugar de peinarte empiezas a "acomodar" los pelos que te quedan.
Infancia: época de la vida en que hacemos muecas en el espejo.
Mediana edad: la época de la vida en la que el espejo se venga.
Tú sabes que estás en la mediana edad cuando todo aquello que la Madre Naturaleza te dio, el Padre Tiempo empieza a llevárselo.
Mediana edad es cuando dejamos de criticar a la generación más vieja y empezamos a criticar a la generación más joven.
Mediana edad es cuando ya no tenemos edad para dar malos ejemplos, entonces... pasamos a dar buenos consejos, (y todos se cagan de la risa de ellos).
Mediana edad es cuando sabemos todas las respuestas pero nadie nos pregunta nada.
Mediana edad es cuando... si alguien se te viene encima en el cine es porque está buscando el pasamanos.
No hay remedio para el nacer o el morir; lo único que nos queda es saborear el “intervalo”.
Hay tres períodos en la vida:
Infancia, juventud y “se te ve espléndido".
Estás en la mediana edad?
¡Ánimo!
Lo peor, ¡todavía está por llegar!

22 de marzo de 2012

¿Que es un Biólogo?



Un Biólogo no....
Un biologo no come, degusta.
Un biólogo no huele, olfatea.
Un Biólogo no toca, palpa.
Un Biólogo no respira, rompe carbohidratos.
Un Biólogo no se deprime, sufre disfunción del hipotálamo
Un Biólogo no admira la natureza, analiza el ecosistema.
Un Biólogo no hace elogios, describe procesos.
Un Biólogo no tiene reflejos, tiene un mensaje de neurotransmisión involuntaria. Un biologo no tiene una función en la sociedad, tiene un nicho ecológico.
Un biólogo no hace limpieza, hace mejoramiento del hábitat.
Un biólogo no va de compras, va a aprovechar el recurso.
Un biólogo no tiene conocidos, tiene conespecíficos.
Un biólogo no tiene socios, tiene conespecíficos simbiontes.
Un biólogo no tiene enemigos, tiene conespecíficos competidores por el recurso.
Un biólogo no tiene pareja, tiene complemento génico
Un Biólogo no facilita discusiones, cataliza substratos.
Un Biólogo no coquetea, elabora un "display" reproductivo
Un Biólogo no hace el amor, copula.
Un Biólogo no admite errores, argumenta que sus actos dependen de caracteres hereditarios sumados al aprendizaje adquirido en la infancia.
Un Biólogo no habla, coordina vibraciones de las cuerdas vocales.
Un Biólogo no piensa, realiza sinapsis.
Un Biólogo no se asusta, recibe una respuesta galvánica incoherente.
Un biólogo no se emociona, tiene picos de niveles de adrenalina.
Un biólogo macho no compite, reafirma sus niveles de testosterona.
Un biólogo hembra no es sensible, tiene ciclos hormonales periódicos.
Un Biólogo no llora, produce secreciones lacrimales.
Un Biólogo no espera retorno de llamadas, espera feed backs.
Un Biólogo no se enamora, sufre reacciones químicas y psicosomáticas.
Un Biólogo no pierde energía, gasta ATP.
Un Biólogo no divide, hace meiosis.
Un Biólogo no hace cambios, procesa evoluciones.
Un Biólogo no fallece, sufre muerte histológica.
Un Biólogo no se desprende del espíritu, transforma su energía.
Un Biólogo no deja hijos, alcanza éxito reproductivo y mejora su fitness.
Un Biólogo no deja herencia, deja pool génico.