9 de septiembre de 2010

Los 10 mandamientos del profesor


(Según George Polya. Matématico 1887-1985)

1.- Demuestre interés por su materia. Si el profesor se aburre, toda la clase se aburrirá.

2.- Domine su materia. Si un tema no le interesa personalmente, no lo enseñe, porque no será Vd. capaz de enseñarlo adecuadamente. El interés es una condición necesaria, pero no suficiente. Cualesquiera que sean los métodos pedagógicos utilizados, no conseguiréis explicar algo claramente a vuestros estudiantes si antes no lo habéis comprendido perfectamente. De ahí este segundo mandamiento. El interés es el primero, porque, con algunos conocimientos junto con una falta de interés, se puede uno convertir en un profesor excepcionalmente malo.

3.- Sea instruído en las vías del conocimiento: el mejor medio para aprender algo es descubrirlo por sí mismo. Se puede obtener gran provecho de la lectura de un buen libro o de la audición de una buena conferencia sobre la psicología del acto de aprender. Pero leer y escuchar no son absolutamente necesarios y en todo caso no son suficientes: hay que conocer las vías del conocimiento, estar familiarizados con el proceso que conduce de la experiencia al saber, gracias a la experiencia de vuestros propios estudios y a la observación de vuestros estudiantes.

4.- Trate de leer en el rostro de sus estudiantes, intente adivinar sus esperanzas y sus dificultades; póngase en su lugar. Aunque uno se interese por el tema, lo conozca bien, se comprendan los procesos de adquisición de los conocimientos, se puede ser un mal profesor. Es raro, pero muchos hemos conocido profesores que, siendo perfectamente competentes, no eran capaces de establecer contacto con su clase. Ya que la enseñanza del uno debe acompañarse por el aprendizaje del otro, tiene que existir un contacto entre el Profesor y el estudiante. La reacción del estudiante a vuestra enseñanza depende de su pasado, de sus perspectivas y de sus intereses. Por lo tanto, téngase en consideración lo que saben y lo que no saben; lo que les gustaría saber y lo que no les importa; lo que deben conocer y lo que no importa que no sepan.

5.- No les deis únicamente “saber”, sino “saber hacer”, actitudes intelectuales, el hábito de un trabajo metódico. El conocimiento consiste, parte en “información” y parte en “saber hacer”. El saber hacer es el talento, es la habilidad en hacer uso de la información para un fin determinado; se puede describir como un conjunto de actitudes intelectuales; es la capacidad para trabajar metódicamente. En Matemáticas, el “saber hacer” se traduce en una aptitud para resolver problemas, construir demostraciones, examinar con espíritu crítico soluciones y pruebas. Por eso, en Matemáticas, la manera cómo se enseña es tan importante como lo que se enseña.

6.- Enseñadles a conjeturar. Primero imaginar, después probar. Así es como procede el descubrimiento, en la mayor parte de los casos. El profesor de Matemáticas tiene excelentes ocasiones para mostrar el papel de la conjetura en el campo del descubrimiento y hacer así que los estudiantes adquieran una actitud intelectual fundamental. La conjetura razonable debe estar fundada en la utilización juiciosa de la evidencia inductiva y de la analogía, y encierra todos los conocimientos plausibles que pueden intervenir en el método científico.

7.- Enseñadles a demostrar. “Las matemáticas son una buena escuela de razonamiento demostrativo”. De hecho, la verdad va más allá: las matemáticas pueden extenderse al razonamiento demostrativo, que se infiltra en todas las ciencias desde que alcanzan un nivel matemático y lógico suficientemente abstracto y definido.

8.- En el problema que estéis tratando, distinguid lo que puede servir, más tarde, a resolver otros problemas – intentad revelar el modelo general que subyace en el fondo de la situación concreta que afrontáis. Cuando presentéis la solución de un problema, subrayad sus rasgos instructivos. Una particularidad de un problema es instructiva si merece ser imitada. Un aspecto bien señalado, en un problema, y vuestra solución puede transformarse en un modelo de resolución, en un esquema tal que, imitándole, el estudiante pueda resolver otros problemas.

9.- No reveléis de pronto toda la solución; dejad que los estudiantes hagan suposiciones, dejadles descubrir por sí mismos siempre que sea posible. He aquí una pequeña astucia fácil de aprender: cuando se empieza a discutir la solución de un problema, dejad que los estudiantes adivinen su solución. Quien tiene una idea o la ha formulado, se ha comprometido: debe seguir el desarrollo de la solución para ver si lo que ha conjeturado es exacto o no, con lo que no puede despistarse. Voltaire decía: “El secreto para ser aburrido es decirlo todo”.

10.- No inculquéis por la fuerza, sugerid. Se trata de dejar a los estudiantes tanta libertad e iniciativa como sea posible, teniendo en cuenta las condiciones existentes de la enseñanza. Dejad que los estudiantes hagan preguntas; o bien planteadles cuestiones que ellos mismos sean capaces de plantear. Dejad que los estudiantes den respuestas; o bien da respuestas que ellos mismos sean capaces de dar.

Lo que se siembra... se cosecha


Una mañana una mujer bien vestida se paró frente a un hombre desamparado, quien lentamente levantó la vista... y miro claramente a la mujer que parecía acostumbrada a las cosas buenas de la vida. Su abrigo era nuevo. Parecía que nunca se había perdido de una comida en su vida. Su primer pensamiento fue: “Solo se quiere burlar de mi, como tantos otros lo habían hecho ...

"Por Favor Déjeme en paz !! gruñó el Indigente... Para su sorpresa, la mujer siguió enfrente de el. Ella sonreía, sus dientes blancos mostraban destellos deslumbrantes.
"¿Tienes hambre?" preguntó ella. "No", contestó sarcásticamente. "Acabo de llegar de cenar con el presidente ... Ahora vete."
La sonrisa de la mujer se hizo aún más Grande.
De pronto el hombre sintió una mano suave bajo el brazo. "¿Qué hace usted, señora?" -preguntó el hombre enojado.
“Le digo que me deje en paz” !!

Justo en ese momento un policía se acercó. "¿Hay algún problema, señora?" -le preguntó el oficial ..
"No hay problema aquí, oficial, contestó la mujer .. "Sólo estoy tratando de ayudarle para que se ponga de pie ...
¿Me ayudaría? El oficial se rascó la cabeza. "Si, el Viejo Juan, Ha sido un estorbo por aquí por los últimos años.
¿Qué quiere usted con él?" Pregunto el oficial ...
"Ve la cafetería de allí?" -preguntó ella. "Yo voy a darle algo de comer y sacarlo del frío por un ratito."
"¿Está loca, señora?" el pobre desamparado se resistió. "Yo no quiero ir ahí! Entonces sintió dos fuertes manos agarrandolo
De los brazos y lo levantaron.
"Déjame ir oficial, Yo no hice nada .."

"Vamos Viejo, esta es una Buena oportunidad para ti," el oficial le susurro al oido ."
Finalmente, y con cierta dificultad, la mujer y el agente de policía llevaron al Viejo Juan a la cafetería y lo sentaron en una mesa en un Rincón de la cafetería. Era casi mediodía , la mayoría de la gente ya había almorzado y el grupo para la comida aún no había llegado ...
El gerente de la cafeteria se acercó y les pregunto. "¿Qué está pasando aquí, oficial?" "¿Qué es todo esto?
Y este hombre esta en problemas?"
"Esta señora lo trajo aquí para que coma algo," respondió el policía.

"Oh no, Aquí no !" el gerente respondió airadamente. "Tener una persona como este aquí es malo para mi negocio !!!

El Viejo Juan esbozó una sonrisa con sus pocos dientes. "Señora, se lo dije. Ahora, si van a dejarme ir ?. Yo no quería venir aquí desde un principio."
La mujer se dirigió al gerente de la cafetería y sonrió .. "Señor, ¿está usted familiarizado con Hernandez y Asociados ??,

la firma bancaria que esta a dos calles ?"
"Por supuesto que los conozco", respondió el administrador con impaciencia. "Ellos tienen sus reuniones semanales en una de mis salas de banquetes."

"¿Y se gana una buena cantidad de dinero con el suministro de alimentos en estas reuniones semanales?"
PREGUNTO La Señora ...
"¿Y eso que le importa a usted?

Yo, señor, soy Penélope Hernandez, presidente y dueña de la compañía ". “Oh Perdon !! dijo el gerente ...

La mujer sonrió de nuevo .. "Pensé que esto podría hacer una diferencia en su trato."
Le dijo al policía, que fuertemente trataba de contener una carcajada. "¿Le gustaría tomar con nosotros una taza de café o tal vez una comida, oficial?" "No, gracias, señora", replicó el oficial. "Estoy en servicio".
"Entonces, quizá, una taza de café para llevar ?"
"Sí, señora. Eso estaria mejor".
El gerente de la cafetería giró sobre sus talones como recibiendo una orden. –
“Voy a traer el café para usted de inmediato señor oficial "

El oficial lo vio alejarse. Y opino :"Ciertamente lo ha puesto en su lugar", dijo.
"Esa no fue mi intención “ dijo la señora ... Lo crea o no, tengo una buena razón para todo esto".

Se sentó a la mesa frente a su invitado a cenar. Ella lo miró fijamente...
"Juan ¿te acuerdas de mí?"
El viejo Juan miro su rostro, el rostro de ella, con los ojos lagañosos "Creo que sí - Digo , se me hace familiar".

"Mira Juan , quiza estoy un poco mas grande , pero mirame bien", dijo la Señora .. "Tal vez me veo mas llenita ahora ... pero cuando tu trabajabas aqui hace muchos años vine aqui una vez, y por esa misma puerta, muerta de hambre y frio."
Algunas lágrimas posaron sobre sus mejillas ..

"¿Señora?" dijo el Oficial, No podía creer lo que estaba presenciando, ni siquiera pensar que la mujer podría llegar a tener hambre.
"Yo acababa de graduarme de la Universidad en mi pueblo", la mujer comentó. "Yo había llegado a la ciudad en busca de un trabajo, pero no pude encontrar nada. Con la voz quebrantada la mujer continuaba: Pero cuando me quedaban mis últimos centavos y me habían corrido de mi apartamento. Caminaba por las calles, y era en febrero y Hacía frío y casi muerta de hambre. vi este lugar y entre con una poca posibilidad de que podría conseguir algo de comer. " Con lágrimas en sus ojos la mujer siguió platicando ...

Juan me recibio con una sonrisa. "Ahora me acuerdo", dijo Juan. "Yo estaba detrás del mostrador de servicio. Se acercó y me preguntó si podría trabajar por algo de comer”. “ Me dijiste que estaba en contra de la política de la empresa".
Continuó la mujer.. -Entonces, tu me hiciste el sándwich de carne mas grande que había visto nunca... me diste una taza de café, y me fui a un rincón a disfrutar de mi comida. Tenía miedo de que te metieras en problemas. Luego, cuando miré y te vi a poner el precio de la comida en la caja registradora, supe entonces que todo iba a estar bien ".

"Así que usted comenzó su propio negocio?" El viejo Juan dijo.

" Si, encontré un trabajo esa misma tarde. Trabajé muy duro, y me fui hacia arriba con la ayuda de Mi Padre Dios. Eventualmente empecé mi propio negocio que, con la ayuda de Dios, prosperó .." Ella abrió su bolso y sacó una tarjeta. "Cuando termines aquí , quiero que vayas a hacer una visita al señor Martínez. Él es el director de personal de mi empresa. Iré a hablar con él y estoy segura de que encontrará algo para que puedas hacer algo en la oficina ".
Ella sonrió. "Creo que incluso podría darte un Adelanto, lo suficiente para que puedas comprar algo de ropa y conseguir un lugar para vivir hasta que te recuperes. Si alguna vez necesitas algo, mi puerta está siempre abierta para ti Juan."

Hubo lágrimas en los ojos del anciano. "¿Cómo voy a agradecer? , preguntó.
"No me des las gracias", respondió la mujer. "A Dios dale la gloria. El me trajo a ti."

Fuera de la cafetería, el oficial y la mujer se detuvieron y antes de irse por su lado .. "Gracias por toda su ayuda, oficial."
Dijo La Sra. Hernandez.”
“Al contrario, dijo el oficial,", "Gracias. Vi un milagro hoy, algo que nunca voy a olvidar. Y ... Y gracias por el café. ".....

27 de agosto de 2010

¿Cuantos años tengo?



¿Cuántos años tengo?
¡Qué importa eso!
¡Tengo la edad que quiero y siento!

La edad en que puedo: Gritar sin miedo lo que pienso...
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o a lo desconocido...
Pues tengo la experiencia de los años vividos,
y la fuerza de la convicción de mis deseos.

¡Qué importa cuantos años tengo!
¡No quiero pensar en ello!
Pues unos dicen que ya soy viejo,
"y otros que estoy en el apogeo".

Pero no es la edad que tengo,
ni lo que la gente dice,
sino lo que mi corazón siente
y mi cerebro dicte.

Tengo los años necesarios
para gritar lo que pienso,
para hacer lo que quiero,
para reconocer yerros viejos,
rectificar caminos y atesorar éxitos.

Ahora no tienen porque decir:
¡Está muy joven, no lo logrará!
¡Esta muy viejo, ya no podrá!

Tengo la edad en que las cosas
se miran con mas calma,
reconociendo el valor de cada una de ellas,
pero con el interés de seguir creciendo,
con el respeto que se merecen,
y con la mesura correspondiente

Tengo los años en que los sueños
se empiezan a acariciar con los dedos,
y las ilusiones se convierten en esperanza,
la edad en la que uno piensa o sueña
un mundo mejor que heredarle a nuestros hijos,
y nos preocupamos por eso.

Tengo los años en que el amor,
a veces es una loca llamarada,
ansiosa de consumirse en el fuego
de una pasión deseada.
Y otras es un remanso de paz,
como el atardecer en la playa.

¿Qué cuántos años tengo?
No necesito con un número marcarlos,
pues mis anhelos alcanzados,
mis triunfos obtenidos,
y las lágrimas que por el camino derramé
al ver mis ilusiones truncadas
o al momento en que los demás
reconocieron cada uno de mis éxitos...
esas lagrimas...¡Valen mucho más que eso!

¡Qué importa si cumplo cincuenta,
sesenta, setenta o más!
Pues lo que importa,
¡Es la edad que siento!

Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.
Para seguir sin temor por el sendero,
pues llevo conmigo la experiencia adquirida
y la fuerza de mis anhelos.

¿Qué cuántos años tengo?
¡Eso a quién le importa!
¡Tengo los años necesarios para perder el miedo
y hacer lo que quiero y creo conveniente en mi vida
hago lo que siento!

No importa si estoy joven o viejo
pero una cosa si te puedo asegurar
que independientemente de que yo esté como esté,
tengo la edad suficiente
para agradecer a la vida por permitirme ser
y estar aquí en este momento contigo.

¿Que cuantos años tengo?
no lo sé, ni me interesa
mientras tu existas en mi vida
yo viviré.

Ha fallecido el sentido común


Hoy lloramos la muerte de un querido amigo, 'Sentido Común', que ha estado entre nosotros durante muchos años.

Nadie sabe a ciencia cierta cuántos años tenía, puesto que los datos sobre su nacimiento hace mucho que se han perdido en los vericuetos de la burocracia.

Será recordado por haber sabido cultivar lecciones tan valiosas como que hay que trabajar para poder tener un techo propio sobre la cabeza; que se necesita leer todos los días un poco; saber por qué los pájaros que madrugan consiguen lombrices, y también por reconocer la validez de frases tales como 'la vida no siempre es justa' y 'tal vez haya sido yo el culpable'.

Sentido Común vivió bajo simples y eficaces consignas (no gastes más de lo que ganas), y estrategias parentales confiables (los adultos están a cargo, no los niños)

Su salud comenzó a deteriorarse rápidamentecuando se aplicaron reglas bien intencionadas pero ineficaces: informes respecto a un niño de seis años acusado de abuso sexual por haber dado un beso a una compañera de clase; adolescentes que debieron irse a otro colegio por haber denunciado a un compañero distribuidor de droga, y una maestra despedida por reprender a un alumno indisciplinado, sólo hicieron que empeorara su condición.

Sentido Común perdió terreno cuando los padres atacaron a los maestros, sólo por hacer el trabajo en el que ellos fracasaron: disciplinar a sus ingobernables hijos.

Declinó aún más cuando las escuelas debieron requerir un permiso de los padres para administrar una aspirina, poner protector solar, o colocar una tirita a un alumno.
Aunque eso sí, no podían informar a los padres si una alumna estaba embarazada y quería abortar.

Sentido Común perdió el deseo de vivir cuando los Diez Mandamientos se convirtieron en material risible, algunas iglesias en negocios, y los criminales empezaron a recibir mejor trato que sus víctimas.

Para Sentido Común fue un duro golpe que uno ya no pueda defenderse de un ladrón en su propia casa,pero que el ladrón pueda demandarnos por agresión; y que si un policía mata a un ladrón, incluso si éste estaba armado, sea inmediatamente investigado por exceso de defensa, cuando no acusado de gatillo fácil.

Y así, muchísimos casos más de nuestra vida terrenal.

La muerte de Sentido Común fue precedida por la de sus padres,Verdad y Confianza; la de su esposa, Discreción; la de su hija, Responsabilidad, y la de su hijo, Raciocinio .
Le sobreviven sus tres hermanastros:
'Conozco Mis Derechos', 'Otro Tiene la Culpa' y 'Soy Una Víctima de la Sociedad'.

No hubo mucha gente en su funeral porque muy pocos se enteraron de que se había ido.

1 de agosto de 2010

Contra el racismo


En un avión, iniciado el vuelo, una "señora" oprime insistentemente el timbre para llamar a la azafata

-¿Cuál es el problema, Sra.? - Pregunta la azafata

-¿Es que no lo ve? - Responde la dama

- Me colocaron junto a un sucio INDÍGENA. No soporto estar al lado de uno de estos seres repugnantes. ¿¿¡¡No tiene otro asiento!!??

-Por favor, cálmese… -dice la azafata- Casi todos los asientos están ocupados. Pero, voy a ver si hay un lugar disponible

La azafata se aleja y vuelve de nuevo algunos minutos más tarde:

-Sra., como yo pensaba, ya no hay ningún lugar libre en la clase económica. Hablé con el Comandante y me confirmó que no hay más sitios disponibles en la clase económica. No obstante, tenemos aún un lugar en primera clase.

-Antes de que la dama pudiera hacer el menor comentario, la azafata sigue:

-Es del todo inusual permitir a una persona de la clase económica sentarse en primera clase. Pero, dadas las circunstancias, el Comandante encuentra que sería escandaloso obligar a alguien a sentarse junto a una persona tan repugnante.

Todos los pasajeros alrededor, observaban la escena, indignados.

Entonces, la azafata, dirigiéndose al indígena, le dice:

-Si el Sr. lo desea, tome su equipaje de mano, ya que un asiento en primera clase le espera.

Y los pasajeros, que sorprendidos, presenciaban la escena, se levantaron y aplaudieron.

La última conferencia

La madre


Cuando viniste a este mundo,
Ella te sostuvo en sus brazos.
Sin embargo…tú se lo agradeciste gritando.

Cuando tenías un 1 año,
Ella te alimentaba y te bañaba.
Sin embargo, tú se lo agradeciste llorando la noche entera.

Cuando tenías 2 años,
Ella te enseñó a caminar.
Sin embargo, tú se lo agradeciste huyendo de ella cuando te llamaba.

Cuando tenías 3 años,
Ella te hacía todas las comidas con amor.
Sin embargo, tú se lo agradeciste tirando el plato al piso.

Cuando tenías 4 años,
Ella te dio unos lápices de colores.
Sin embargo, tú se lo agradeciste pintando todas las paredes del comedor.

Cuando tenías 5 años,
Ella te vestía para las ocasiones especiales.
Sin embargo, tú se lo agradeciste tirándote enlodándote a más no poder.

Cuando tenías 6 años,
Ella te llevaba a la escuela.
Sin embargo, tú se lo agradeciste gritándole: ¡NO VOY A IR!

Cuando tenías 7 años,
Ella te regaló una pelota.
Sin embargo, tú se lo agradeciste arrojándola contra la ventana del vecino.

Cuando tenías 8 años,
Ella te trajo un helado.
Sin embargo, tú se lo agradeciste derramándoselo sobre su falda.

Cuando tenías 9 años,
Ella té pago unas clases de piano.
Sin embargo, tú se lo agradeciste nunca practicando.

Cuando tenías 10 años,

Ella te llevaba con el auto a todas partes de gimnasio al partido de fútbol, de fiestas de cumpleaños, a otras fiestas.
Sin embargo, tú se lo agradeciste cuando salías del coche y nunca mirabas atrás.

Cuando tenías 11 años,
Ella te llevó a ti y a tus amigos a ver una película.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole que se sentara en otra fila.

Cuando tenías 12 años,
Ella te aconsejó que no miraras ciertos programas.
Sin embargo, tú se lo agradeciste esperando que ella se fuera de la casa.

Cuando tenías 13 años,
Ella te sugirió un corte de pelo que estaba de moda.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole que Ella no tenía gusto.

Cuando tenías 14,
Ella té pagó un mes de vacaciones en el campamento de verano.
Sin embargo, tú se lo agradeciste olvidándote de escribirle una carta.

Cuando tenías 15,
Ella venía de trabajar y quería darte un abrazo.
Sin embargo, tú se lo agradeciste cerrando con llave la puerta de tu habitación.

Cuando tenías 16,
Ella te enseñó cómo manejar su coche.
Sin embargo, tú se lo agradeciste usándoselo todas las veces que podías.

Cuando tenías 17 años,
Ella esperaba una llamada importante..
Sin embargo, tú se lo agradeciste, hablando por teléfono toda la noche.

Cuando tenías 18,
Ella lloró en la fiesta de tu graduación de la escuela.
Sin embargo, tú se lo agradeciste estando de fiestas hasta el amanecer.

Cuando tenías 19 años,
Ella té pagó la cuota de la universidad, te llevó en coche hasta el campus y cargó tus maletas.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole adiós desde fuera del dormitorio, así no te sentirías avergonzado ante tus amigos.

Cuando tenías 20 años,
Ella te preguntó si estabas saliendo con alguien.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole: 'A Ti no te importa eso'

Cuando tenías 21 años,
Ella te sugirió algunas carreras para tu futuro.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole: 'No quiero ser como Tú.'

Cuando tenías 22,
Ella te abrazó en la fiesta de graduación de la Universidad.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole si te podía pagar un viaje a Europa.

Cuando tenías 23,
Ella te dio algunos muebles para tu primer departamento.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndoles a tus amigos que los muebles eran feos.

Cuando tenías 24,
Ella conoció a tu futura esposa (o) y le preguntó sus planes para el futuro.
Sin embargo, tú se lo agradeciste con una mirada feroz y le gritaste '¡Cállate!'.

Cuando tenías 27,
Ella te ayudó a pagar los gastos de tu boda y llorando te dijo que te amaba muchísimo.
Sin embargo, tú se lo agradeciste mudándote por la mitad del país.

Cuando tenías 30,
Ella te dio algunos consejos para cuidar al bebé.
Sin embargo, tú se lo agradeciste, diciéndole que las cosas son diferentes ahora.

Cuando tenías 40,
Ella te llamó para recordarte el cumpleaños de tu Papá.
Sin embargo, tú se lo agradeciste diciéndole que estabas muy ocupado.

Cuando tenías 50,
Ella se enfermó y necesitó que la cuidaras.
Sin embargo, tú se lo agradeciste leyendo sobre la carga que representan los padres hacia los hijos.

De repente, un día............., ella silenciosamente MURIOOOO......!!!!. Y todas las cosas que nunca hiciste cayeron como un trueno.

Tomémonos un momento para rendir honor y tributo a la persona que llamamos MAMÁ, aunque algunos no la pueden llamar así de ese modo abiertamente.

No hay sustituto para Ella. Alegra cada momento, aunque a veces, ella no parezca la mejor de las amigas, quizás no concuerde con tu forma de pensar, pero aún así, ¡Es tú Madre!

Ella estará allí para ayudarte con tus dolores, tus penas, tus frustraciones.

Pregúntate a ti mismo:
¿Has LIMITADO tu tiempo para estar con Ella, para escuchar sus quejas sobre el trabajo en la cocina, su cansancio?

Sé prudente, generoso y muéstrale el debido respeto, aunque tú pienses diferente de ella.
Una vez que se vaya de este mundo, solamente los recuerdos cariñosos del ser que llamamos Mamá.

Solo eso nos queda…a algunos desgraciadamente.

27 de julio de 2010

La difícil decisión de ser Maestro


Platicaba un día un padre con su hijo y decíale éste emocionado:

- Padre, llegado ha el momento de decidir qué quiero ser en la vida; mucho he pensado al respecto, pero es tanto el saber humano que mi decisión difícil se ha vuelto.

El padre al fin, sabio por experiencia, cuestionó entonces a su vástago de la siguiente manera:

- ¿Qué tanto has pensado que te hace dudar?

- Mira padre -respondió el hijo-, médico he pensado ser, para curar cuerpos o mentes y cuando al fin he aceptado, cuenta me doy que mucha falta hace quien ayude a impartir justicia al débil y desprotegido, entonces prefiero ser abogado. Luego, siento la necesidad de aprender el secreto del arte de la construcción; de sacar de la piedra bruta un hogar confortable para mis semejantes, es cuando decido ser arquitecto o ingeniero; más es tanto el desarrollo científico que prefiero ser investigador o químico o matemático, o me decido por la contaduría o administración, por la física, por el campo, por los animales, por el espacio exterior...

El padre atento, esbozó una sonrisa y dijo con ese tono que tienen los padres cuando amorosamente pueden aconsejar a sus hijos con la sapiencia que dan los años vividos:

- Hijo: doctor, abogado, arquitecto, ingeniero, contador, astrofísico... todo ello puedes ser; y lo lograrás en la profesión que tú no has mencionado. Para alcanzarlo deberás conocer y saber mucho; tu mente deberá convertirse en un transporte de la cultura universal; aún así, deberás poner todo tu empeño en el trabajo a realizar en tu campo de acción.

Serás un moldeador de mentes; tú forjarás al médico, al astronauta, al campesino, al constructor, al comerciante, al abogado, al músico; podrás con esta profesión incubar en los corazones de los individuos los sentimientos de amor, bondad, ilusión, tolerancia, libertad, igualdad y fraternidad. Pero mucho cuidado hijo mío, en ésta no puedes cometer errores ya que podrías crear deformidades que se volvieran en contra de sus propios hermanos, por la generación de una ambición desmedida, tan sólo satisfecha por la material sensación del poder. Tendrás por seguidores a los llamados discípulos, ante ellos te presentarás como figura fiel y como imagen del ejemplo mismo. Te volverás todas y cada una de las profesiones existentes.

Con el tiempo verás tu reflejo en cada una de las figuras que tú formaste; entonces hijo, con toda tu entrega a esta fascinante y noble profesión, podrás con la mente en alto, otear el horizonte en donde mirarás tus obras, sintiendo en ese instante que has cumplido con los pensamientos que hoy enredan tus ideas y te darás cuenta que con tus palabras y actos has fertilizado las semillas que sembraste en tierra fértil y que se han convertido, o lo harán después, en grandes, fuertes y frondosos árboles que acudirán a darte sombra protectora cuando estés a punto de cumplir con el mandato de la Madre Tierra que exige a su descendencia regresar a ella.

Sentirás que tu paso por esta vida no ha sido en vano.

Escucha bien hijo mío, si aceptas esta responsabilidad tan grande sobre tus hombros, decídete por la profesión que llevo con orgullo y que en estas palabras venero tanto. Conviértete en Maestro, hijo mío, y sabrás entonces cuánto has ganado.

El hijo comprendió cuál camino debía seguir; y con el corazón latiendo fuertemente y embargado de gran emoción, se acercó a su padre, Maestro de muchas generaciones y secó las lágrimas de honor que de sus ojos habían brotado. Le besó en la frente y decidió al fin en lo que se convertiría: un Maestro que con su trabajo, rinda reconocimiento a la labor de los grandes Maestros que hubiera tenido. Maestros que a él, lo hubieron forjado.

Con mucho cariño y respeto para la labor de todos mis colegas maestros.

Profr. Martín A. Alcocer González. Mérida, Yucatán.

22 de julio de 2010

Nunca te detengas


Siempre ten presente que la piel se arruga, el pelo se vuelve blanco, los días se convierten en años...

Pero lo importante no cambia; tu fuerza y tu convicción no tienen edad.

Tu espíritu es el plumero de cualquier tela de araña.

Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida.

Detrás de cada logro, hay otro desafío.

Mientras estés viva, siéntete viva.

Si extrañas lo que hacías, vuelve a hacerlo.

No vivas de fotos amarillas...

Sigue aunque todos esperen que abandones.

No dejes que se oxide el hierro que hay en ti.

Haz que en vez de lástima, te tengan respeto.

Cuando por los años no puedas correr, trota.

Cuando no puedas trotar, camina.

Cuando no puedas caminar, usa el bastón.

¡Pero nunca te detengas!!

Madre Teresa de Calcuta

Ama sin condición


Una historia que fue contada por un soldado que pudo regresar a casa después de haber peleado en la guerra de Vietnam. Le hablo a sus padres desde San Francisco.

- "Mama, Papa. Voy de regreso a casa, pero les tengo que pedir un favor: Traigo a un amigo que me gustaría que se quedara con nosotros."

-"Claro," le contestaron, "Nos encantaría conocerlo."

-"Hay algo que deben de saber", el hijo sigo diciendo, "el fue herido en la guerra. Piso en una mina de tierra y perdió un brazo y una pierna. El no tiene a donde ir, y quiero que el se venga a vivir con nosotros a casa."

- "Siento mucho el escuchar eso hijo. A lo mejor podemos encontrar un lugar en donde el se pueda quedar."

-"No, Mama y Papa, yo quiero que el viva con nosotros."

- "Hijo," le dijo el padre, "tu no sabes lo que estas pidiendo.

Alguien que este tan limitado físicamente puede ser un gran peso para nosotros. Nosotros tenemos nuestras propias vidas que vivir, y no podemos dejar que algo como esto interfiera con nuestras vidas. Yo pienso que tu deberías de regresar a casa y olvidarte de esta persona. El encontrara una manera en la que pueda vivir el solo."

En ese momento el hijo colgó la bocina del teléfono. Los padres ya NO volvieron a escuchar de el. Unos cuantos días después, los padres recibieron una llamada telefónica de la policía de San Francisco. Su hijo había muerto después de que se había caído de un edificio, fue lo que les dijeron. La policía creía que era un suicidio.

Los padres destrozados de la noticia volaron a San Francisco y fueron llevados a la morgue de la ciudad a que identificaran a su hijo. Ellos lo reconocieron, para su horror ellos descubrieron algo que no sabían, su hijo tan solo tenia un brazo y una pierna.

Los padres de esta historia son como muchos de nosotros. Encontramos muy fácil el amar esas personas que son hermosas por afuera o que son entretenedoras, pero no nos gusta la gente que nos hace sentir alguna inconveniencia o que nos hace sentir incómodos. Preferimos estar alejados de personas que no son muy saludables, hermosas o inteligentes como lo somos nosotros.

Afortunadamente, hay una persona que no nos trata de esa manera.

Alguien que nos ama con un gran amor, que siempre nos recibirá en su familia, no importa que tan destrozados estemos, física o mentalmente.

Cuando sea viejo


El día que este viejo y ya no sea el mismo, ten paciencia y compréndeme.

Cuando derrame comida sobre mi camisa y olvide como atarme mis zapatos, recuerda las horas que pase enseñándote a hacer las mismas cosas.

Si cuando conversas conmigo, repito y repito las mismas palabras que sabes de sobra como termina, no me interrumpas y escúchame. Cuando eras pequeño(a) para que te durmieras tuve que contarte miles de veces el mismo cuento hasta que cerrabas los ojitos.

Cuando estemos reunidos y sin querer haga mis necesidades, no te averguences y compréndeme que no tengo la culpa de ello, pues ya no puedo controlarlas.

Piensa cuantas veces cuando niño(a)te ayude y estuve paciente a tu lado esperando a que terminaras lo que estabas haciendo.

No me reproches porque no quiera bañarme; no me regañes por ello.

Recuerda los momentos que te perseguí y los mil pretextos que te inventaba para hacerte mas agradable tu aseo. Acéptame y perdóname. Ya que soy el niño ahora.

Cuando me veas inútil e ignorante frente a todas las cosas tecnológicas que ya no podré entender, te suplico que me des todo el tiempo que sea necesario para no lastimarme con tu sonrisa burlona.

Acuérdate que yo fui quien te enseñó tantas cosas.

Comer, vestirte y tu educación para enfrentar la vida tan bien como lo haces, son producto de mi esfuerzo y perseverancia por ti.

Cuando en algún tiempo mientras conversamos me llegue a olvidar de que estamos hablando, dame todo el tiempo que sea necesario hasta que yo recuerde, y si no puedo hacerlo no te burles de mi; tal vez no era importante lo que hablaba y me conforme con que me escuches en ese momento.

Si alguna vez ya no quiero comer, no me insistas.

Se cuanto puedo y cuanto no debo. También comprende que con el tiempo ya no tengo dientes para morder ni gusto para sentir.

Cuando me fallen mis piernas por estar cansadas para andar, dame tu mano tierna para apoyarme como lo hice yo cuando comenzaste a caminar con tus débiles piernas.

Por ultimo, cuando algún día me oigas decir que ya no quiero vivir y solo quiero morir, no te enfades. Algún día entenderás que esto no tiene que ver con tu cariño o cuanto te ame.

Trata de comprender que ya no vivo sino que sobrevivo, y eso no es vivir.

Siempre quise lo mejor para ti y he preparado los caminos que has debido recorrer.

Piensa entonces que con el paso que me adelanto a dar estaré construyendo para ti otra ruta en otro tiempo, pero siempre contigo.

No te sientas triste o impotente por verme como me ves. Dame tu corazón, compréndeme y apóyame como lo hice cuando empezaste a vivir.

De la misma manera como te he acompañado en tu sendero, te ruego me acompañes a terminar el mío dame amor y paciencia, que te devolveré gratitud y sonrisas con el inmenso amor que tengo por tí.

Preferible hoy y no mañana


  1. Prefiero que compartas conmigo unos pocos minutos ahora que estoy vivo y no una noche entera cuando yo muera.
  2. Prefiero que estreches suavemente mi mano ahora que estoy vivo, y no apoyes tu cuerpo sobre mi cuando yo muera.
  3. Prefiero que hagas una sola llamada ahora que estoy vivo y no emprendas un inesperado viaje cuando yo muera.
  4. Prefiero que me regales una sola flor ahora que estoy vivo y no me envíes un hermoso ramo cuando yo muera.
  5. Prefiero que elevemos al cielo una oración ahora que estoy vivo y no una misa cantada y celebrada cuando yo muera.
  6. Prefiero que me digas unas palabras de aliento ahora que estoy vivo y no un desgarrador poema cuando yo muera.
  7. Prefiero escuchar un solo acorde de guitarra ahora que estoy vivo, y no una conmovedora serenata cuando yo muera.
  8. Prefiero me dediques una leve plegaria ahora que estoy vivo y no un poético epitafio sobre mi tumba cuando yo muera.
  9. Prefiero disfrutar de los más mínimos detalles ahora que estoy vivo y no de grandes manifestaciones cuando yo muera.
  10. Prefiero escucharte un poco nervioso diciendo lo que sientes por mí ahora que estoy vivo y no un gran lamento porque no lo dijiste a tiempo.

Aprovechemos a nuestros seres queridos, ahora que están entre nosotros...

Valora a las personas que están a tu alrededor. Así que hazlo personalmente o ya sea con un mail, una llamada o con lo que sea pero hazlo.

20 de julio de 2010

Princesas en peligro de extinción

Me gustan las mujeres que aun quieren ser princesas y se niegan a convertirse en sapos, porque mientras existan mujeres que todavía guarden modales de doncella, existiremos hombres que aun veremos importante el comportarnos como caballeros.

Amo a la mujer que no compite con los hombres, porque sabe que el hombre jamás será su rival sino un complemento de ella misma. Respeto a las mujeres que luchan por ser cada día más mujeres y en ningún sentido buscan parecerse a los hombres, pues muchas mujeres en su búsqueda de la llamada "liberación femenina", han cometido el error de imitar al varón, pero en los aspectos más deprimentes de éste. Es quizá por esta equivocada conquista que se fajaron pantalones, se dieron el gusto o permiso de vivir aventuras sexuales de una noche, comenzaron a llevarse el cigarrillo a los labios, empezaron a maldecir en público, se desinhibieron en bares y ahora las vemos dando penoso espectáculo, devolviendo el estómago en los baños o embrutecidas y semidesnudas sobre las mesas.

Cometieron el error de querer ser como nosotros los hombres y ahora se dicen "weyes" de manera amistosa y permiten que sus amigos varones las llamen "wey" sin darse cuenta que en lugar de mostrarles confianza o camaradería con esa palabra, lo que verdaderamente hacen es rebajarles a nivel de bestias; pero muchas ríen, pues ni siquiera se dan cuenta. Las generaciones de madres abnegadas, reprimidas y violentadas, enseñaron a sus hijas que la mejor manera de acabar con el yugo masculino era convertirse en el enemigo y así crecieron confundiendo su identidad de mujeres, con la intención de seguir nuestros pasos, muchos de los cuales nos han convertido en seres torcidos y han llevado a nuestro mundo a la debacle moral de la que hoy somos víctimas.

Las niñas de la nueva generación decidieron que el sueño de ser princesas era muy aburrido y esclavizante, así que cambiaron la corona por un pasamontañas y son ahora también delincuentes de alto impacto, servidores públicos podridos, conductoras irresponsables, reinas de belleza involucradas con el narco y hasta líderes sindicales vendidas con algún partido. Me encantan las mujeres que no quieren convertirse en hombres y llegan a la universidad con la firme intención de terminar con honores su carrera.

Las que en lugar de demostrarnos que son capaces de beber media botella de tequila, nos demuestran que pueden dirigir un laboratorio o centro de investigación. Las que no buscan un buen partido para casarse sino que buscan ser un buen partido para que un buen hombre las merezca.. Las que saben decir no, cuando "NO" es la única respuesta digna de una dama, aunque todo el mundo las tache de anticuadas y de ñoñas. Las que se ríen de los chistes machistas y entienden que en lugar de ofenderse, deben sentir pena por el hombre que se atreve a contarlos y mucho más si piensa que esas bromas son un verdadero compendio de sabiduría popular.

4 de julio de 2010

Padres malos


El siguiente texto fue entregado por el profesor de Ética y Ciudadanía de la escuela Objetivo/Americana, Sr. Roberto Candelori, a todos los alumnos de su clase, para que lo entregasen a sus padres. La única condición solicitada por el profesor fue que cada alumno permaneciera al lado de sus padres hasta que ellos terminaran la lectura.

El texto fue publicado recientemente debido a lo ocurrido hace poco tiempo en Brasil, las muertes estúpidas de Tarcila Gusmao y Maria Eduarda Dourado, ambas de 16 años, en Maracaípe, Porto de Galinhas. Después de 13 días de desaparecidas, las madres confesaron desconocer a los dueños de la casa donde sus hijas habían ido a pasar el fin de semana. La tragedia acaparó la opinión pública y el crimen aún permanece sin respuesta

Padres Malos

(Dr. Carlos Hecktheuer, Medico Psiquiatra)

“Un día, cuando mis hijos estén lo suficientemente crecidos para entender la lógica que motiva a los padres y madres, yo habré de decirles:

- Los amé lo suficiente como para haberles preguntado a dónde iban, con quién iban y a qué hora regresarían. Los amé lo suficiente para no haberme quedado callado y para hacerles saber, aunque no les gustara, que aquél nuevo amigo no era buena compañía.

- Los amé lo suficiente para hacerles pagar las golosinas que tomaron del supermercado o las revistas del expendio, y hacerles decir al dueño: Nosotros nos llevamos esto ayer y queremos pagarlo

- Los amé lo suficiente como para haber permanecido de pie dos horas, junto a ustedes, mientras limpiaban su cuarto, tarea que yo habría hecho en 15 minutos.

- Los amé lo suficiente para dejarles ver además del amor que sentía por ustedes, la decepción y también las lágrimas en mis ojos.

- Los amé lo suficiente para dejarlos asumir la responsabilidad de sus acciones, aún cuando las penalidades eran tan duras que me partían el corazón.

- Y ante todo, los amé lo suficiente para decirles NO, cuando sabía que ustedes podrían odiarme por eso (y en algunos momentos sé que me odiaron).

Ésas eran las batallas más difíciles de todas. Estoy contento, vencí...

…porque al final ustedes ganaron también!

Y cualquiera de estos días, cuando mis nietos hayan crecido lo suficiente para entender la lógica que motiva a los padres y madres, cuando ellos les pregunten si sus padres eran malos, mis hijos les dirán:

“Sí, nuestros padres eran malos. Eran los padres más malos del mundo...

Los otros chicos comían golosinas en el desayuno y nosotros teníamos que comer cereales, huevos y tostadas. Los otros chicos bebían gaseosas y comían papas fritas y helados en el almuerzo y nosotros teníamos que comer arroz, carne, verduras y frutas.

Mamá y Papa tenía que saber quiénes eran nuestros amigos y qué hacíamos con ellos.

Insistían en que le dijéramos con quién íbamos a salir, aunque demoráramos apenas una hora o menos. Ellos nos insistían siempre para que le dijéramos siempre la verdad y nada más que la verdad.

Y cuando éramos adolescentes, no sé cómo, hasta conseguían leernos el pensamiento. ¡Nuestra vida sí que era pesada!

Ellos no permitían que nuestros amigos nos tocaran el claxon para que saliéramos; tenían que bajar, tocar la puerta y entrar para que ella los conociera.

A los 12 años, todos podían volver tarde por la noche, nosotros tuvimos que esperar como hasta los 16 para poder hacerlo, y aquellos pesados se levantaban para saber si la fiesta había estado buena (sólo para ver en qué estado nos encontrábamos al volver).

Por culpa de nuestros padres, nos perdimos inmensas experiencias en la adolescencia. Ninguno de nosotros estuvo envuelto en problema de drogas, robos, actos de vandalismo, violación de propiedad, ni estuvimos presos por ningún crimen.

TODO FUE CULPA DE ELLOS!”

Ahora que somos adultos, honestos y educados, estamos haciendo lo mejor para ser “PADRES MALOS”, como fueron nuestros padres. YO CREO QUE ESTE ES UNO DE LOS MALES DEL MUNDO DE HOY:

¡NO HAY SUFICIENTES PADRES MALOS!

¡Aquéllos que ya son padres, que no se culpen, y aquéllos que lo serán, que esto les sirva como una alerta!

3 de julio de 2010

Los 3 consejos


Una pareja de recién casados era muy pobre y vivía de los favores de un pueblito del interior. Un día el marido le hizo la siguiente propuesta a su esposa:

-“Querida yo voy a salir de la casa, voy a viajar bien lejos, buscar un empleo y trabajar hasta tener condiciones para regresar y darte una vida más cómoda y digna. No sé cuánto tiempo voy a estar lejos, solo te pido una cosa, que me esperes y mientras yo esté lejos, seas fiel a mí, pues yo te seré fiel a ti.”

Así, siendo joven aún. Camino muchos días a pie, hasta encontrar un hacendado que estaba necesitando de alguien para ayudarlo en su hacienda. El joven llego y se ofreció para trabajar y fue aceptado.

Pidió hacer un trato con su jefe, el cual fue aceptado también. El pacto fue el siguiente:

“Déjeme trabajar por el tiempo que yo quiera y cuando yo encuentre que debo irme, el señor me libera de mis obligaciones: Yo no quiero recibir mi salario. Le pido al señor que lo coloque en una cuenta de ahorro hasta el día en que me vaya. El día que yo salga usted me dará el dinero que yo haya ganado”.

Estando ambos de acuerdo. Aquel joven trabajo durante 20 años, sin vacaciones y sin descanso. Después de veinte años se acerco a su patrón y le dijo:

“Patrón, yo quiero mi dinero, pues quiero regresar a mi casa".

El patrón le respondió: “Muy bien, hicimos un pacto y voy a cumplirlo, solo que antes quiero hacerte una opuesta, ¿está bien? Yo te doy tu dinero y tú te vas, o te doy tres consejos y no te doy el dinero y te vas. Si yo te doy el dinero, no te doy los consejos y viceversa. Vete a tu cuarto, piénsalo y después me das la respuesta”.

El pensó durante dos días, busco al patrón y le dijo: “QUIERO LOS TRES CONSEJOS”

El patrón le recordó: “Si te doy los consejos, no te doy el dinero”.

Y el empleado respondió: “Quiero los consejos”

EL patrón entonces le aconsejo:
1. 'NUNCA TOMES ATAJOS EN TU VIDA. Caminos más cortos y desconocidos te pueden costar la vida.

2. NUNCA SEAS CURIOSO DE AQUELLO QUE REPRESENTE EL MAL, pues la curiosidad por el mal puede ser fatal.

3. NUNCA TOMES DECISIONES EN MOMENTOS DE ODIO Y DOLOR, pues puedes arrepentirte demasiado tarde.

Después de darle los consejos, el patrón le dijo al joven, que ya no era tan joven, así: “AQUÍ TIENES TRES PANES, dos para comer durante el viaje y el tercero es para comer con tu esposa cuando llegues a tu casa.'
El hombre entonces, siguió su camino de vuelta, de veinte años lejos de su casa y de su esposa que el tanto amaba.

Después del primer día de viaje, encontró una persona que lo saludo y le pregunto: “¿Para dónde vas?”

Él le respondió: “Voy para un camino muy distante que queda a más de veinte días de caminata por esta carretera.'

La persona le dijo entonces: “Joven, este camino es muy largo, yo conozco un atajo con el cual llegaras en pocos días”.

El joven contento, comenzó a caminar por el atajo, cuando se acordó del primer consejo, “NUNCA TOMES ATAJOS EN TU VIDA. CAMINOS MAS CORTOS Y DESCONOCIDOS TE PUEDEN COSTAR LA VIDA”, entonces se alejó de aquel atajo y volvió a seguir por el camino normal.

Dos días después se enteró de otro viajero que había tomado el atajo, y lo asaltaron, lo golpearon, y le robaron toda su ropa. ¡Ese atajo llevaba a una emboscada!

Después de algunos días de viaje, y cansado al extremo, encontró una pensión a la vera de la carretera. Era muy tarde en la noche y parecía que todos dormían, pero una mujer mal encarada le abrió la puerta y lo atendió.

Como estaba tan cansado, tan solo le pagó la tarifa del día sin preguntar nada, y después de tomar un baño se acostó a dormir. De madrugada se levantó asustado al escuchar un grito aterrador. Se puso de pié de un salto y se dirigió hasta la puerta para ir hacia donde escuchó el grito. Cuando estaba abriendo la puerta, se acordó del segundo consejo. “NUNCA SEAS CURIOSO DE AQUELLO QUE REPRESENTE EL MAL PUES LA CURIOSIDAD POR EL MAL PUEDE SER FATAL”. Regresó y se acostó a dormir. Al amanecer, después de tomar café, el dueño de la posada le pregunto si no había escuchado un grito y él le contestó que si lo había escuchado. El dueño de la posada de pregunto: ¿Y no sintió curiosidad? Él le contesto que no. A lo que el dueño les respondió: Usted ha tenido suerte en salir vivo de aquí, pues en las noches nos acecha una mujer maleante con crisis de locura, que grita horriblemente y cuando el huésped sale a enterarse de qué está pasando, lo mata, lo entierra en el quintal, y luego se esfuma.

El joven siguió su larga jornada, ansioso por llegar a su casa. Después de muchos días y noches de caminata, ya al atardecer, vio entre los árboles humo saliendo de la chimenea de su pequeña casa, camino y vio entre los arbustos la silueta de su esposa. Estaba anocheciendo, pero alcanzo a ver que ella no estaba sola. Anduvo un poco más y vio que ella tenía en sus piernas, un hombre al que estaba acariciando los cabellos. Cuando vio aquella escena, su corazón se lleno de odio y amargura y decidió correr al encuentro de los dos y matarlos sin piedad. Respiró profundo, apresuró sus pasos, cuando recordó el tercer consejo. “NUNCA TOMES DECISIONES EN MOMENTOS DE ODIO Y DOLOR, PUES PUEDES ARREPENTIRTE DEMASIADO TARDE”. Entonces se paró y reflexionó, decidió dormir ahí mismo aquella noche y al día siguiente tomar una decisión. Al amanecer ya con la cabeza fría, el dijo: “NO VOY A MATAR A MI ESPOSA'. Voy a volver con mi patrón y a pedirle que me acepte de vuelta. Solo que antes, quiero decirle a mi esposa que siempre le fui fiel a ella”

Se dirigió a la puerta de la casa y tocó. Cuando la esposa le abre la puerta y lo reconoce, se cuelga de su cuello y lo abraza afectuosamente. El trata de quitársela de arriba, pero no lo consigue. Entonces con lágrimas en los ojos le dice: “Yo te fui fiel y tú me traicionaste”.

Ella espantada le responde: “¿Cómo? yo nunca te traicione, te espere durante veinte años. El entonces le pregunto: '¿Y quién era ese hombre que acariciabas ayer por la tarde?”

Y ella le contesto: “AQUEL HOMBRE ES NUESTRO HIJO. Cuando te fuiste, descubrí que estaba embarazada. Hoy el tiene veinte años de edad”.

Entonces el marido entró, conoció, abrazó a su hijo y les contó toda su historia, en cuanto su esposa preparaba la cena. Se sentaron a comer el último pan juntos. DESPUÉS DE LA ORACIÓN DE AGRADECIMIENTO, CON LÁGRIMAS DE EMOCIÓN, el partió el pan y al abrirlo, se encontró un cheque con todo su dinero, el pago de sus veinte años de dedicación.

2 de julio de 2010

Una verdad que a lo mejor duela a los chavos, pero muy cierta.

Durante una conferencia sobre las grandes diferencias entre generaciones, un presumido estudiante se tomó la molestia de explicarle a un señor mayor sentado cerca de él, por qué le es imposible a la vieja generación comprender a su generación:

"Usted creció en un mundo diferente, realmente casi primitivo", dijo en voz lo suficientemente alta para que lo escucharan alrededor.

"Los jóvenes de hoy crecimos con televisión, internet, teléfonos celulares, aviones jet, viajes al espacio.

Nuestras sondas espaciales han visitado Marte. Tenemos naves con energía nuclear y autos eléctricos y de hidrógeno. Computadoras con procesos de velocidad de la luz.. y más".

Luego de un breve silencio el señor mayor respondió:

"Tienes razón, hijo mío; nosotros no tuvimos esas cosas cuando éramos jóvenes...

¡Así que las inventamos!

Ahora, dime arrogante, ¿qué estás haciendo TÚ para la próxima generación?"

¡El aplauso fue ensordecedor!

30 de junio de 2010

¿Porqué la gente grita?


Un día Meher Baba preguntó a sus mandalies lo siguiente:
- ¿Por que la gente se grita cuando están enojados?
Los hombres pensaron unos momentos:
Porque perdemos la calma - dijo uno - por eso gritamos.
Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? - preguntó Baba
- No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando estás enojado?
Los hombres dieron algunas otras respuestas pero ninguna de ellas satisfacía a Baba.
Finalmente él explicó:
Cuando dos personas están enojadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Mientras más enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a otro a través de esa gran distancia.

Luego Baba preguntó:- ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran?
Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente, ¿por qué? Sus corazones están muy cerca.
La distancia entre ellos es muy pequeña.

Baba continuó - Cuando se enamoran más aún, qué sucede? No hablan, sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo. Así es cuan cerca están dos personas cuando se aman.

Luego Baba dijo:
-Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan palabras que los distancien más, si no llegará un día en que la distancia sea tan grande que no encontrarán más el camino de regreso.

El guiso de lentejas


Un día, Diógenes estaba comiendo un plato de lentejas, sentado en el umbral de una casa cualquiera. No había ningún alimento en toda Atenas más barato que el guiso de lentejas. Comer guiso de lentejas significaba que te encontrabas en una situación de máxima precariedad.

Pasó un ministro del Emperador y le dijo:

-¡Ay, Diógenes! Si aprendieras a ser más sumiso y adular un poco más al Emperador, no tendrías que comer lentejas.

Diógenes dejó de comer, levantó la vista y, mirando intensamente al acaudalado interlocutor, contestó:

-Ay de ti, hermano. Si aprendieras a comer lentejas, no tendrías que ser sumiso y adular tanto al Emperador.

Paradigma de un hijo


Durante la Semana Santa leí nuevamente el libro de la doctora Carter-Scott, en el que su autora destaca las recomendaciones para tener una vida plena -"If life is a game, these are the rules" ("Si la vida es un juego, éstas son las reglas")- y volví a recordar que lo más importante es estar contento con uno mismo, estar contento con lo que somos física, emocional, espiritual e intelectualmente.

Pero en un segundo libro que leí, también en Semana Santa, su autora destaca que los padres tenemos una influencia muy importante en nuestros hijos. Su autora, Dorothy Law Notre, resalta que: "Los niños son como esponjas, ellos observan e internalizan todo lo que nosotros decimos y hacemos; ellos están aprendiendo de nosotros todo el tiempo, esto aunque nosotros no nos demos cuenta de que les estamos enseñando".

Efectivamente, nuestros hijos son el espejo de nosotros. Rápidamente vinieron a mi mente el sinnúmero de niños que son unos expertos en computadoras, saben tocar el piano, saben bailar flamenco o ballet, saben tocar la guitarra, juegan fútbol americano o sóccer, y tantas otras cosas más que aprenden los niños gracias al tesón, trabajo, esfuerzo y entusiasmo de sus padres. Vinieron también a mi mente las imágenes de Kosovo y el impacto en los niños de tanto odio, agresión, angustia, incertidumbre y peligro que están viviendo. Yo me temo que ellos están aprendiendo a odiar.

¿Qué aprendí del libro de Dorothy "Children Learns What They Live" ("Los Niños Aprenden lo que Ellos Viven"), de la editorial Workman?

* Que lo que somos depende de uno mismo y de nuestro medio ambiente.
* Que los padres somos una parte muy importante del medio ambiente de nuestros hijos -somos un espejo que les refleja mensajes y comportamientos del medio ambiente.
* Que mucho de los hábitos, actitudes y valores que tenemos no son más que un reflejo de lo que vivimos en nuestra casa, son un reflejo de los hábitos, actitudes y valores de nuestros padres
* Que los padres tenemos una gran responsabilidad; responsabilidad que no es tan evidente para los padres jóvenes, y me temo que esto se aplica también para algunos ya no tan jóvenes.
* Que muy pocos padres están preparados para enfrentar esa gran responsabilidad.
* Que tenemos que prepararnos para ser un paradigma-espejo para el aprendizaje de nuestros hijos.

Aprendí también una serie de recomendaciones que destaca Dorothy en su libro:

1.- "Que si los niños viven en un ambiente en el cual impera la crítica, ellos aprenden a criticar y condenar". Si nos dedicamos a criticar a nuestros hijos: Si les decimos, mira nada más qué sucio vienes, qué desarreglado está tu cuarto, eres un burro, ¿qué cree que están aprendiendo de nosotros?
Si hacemos lo mismo con nuestros amigos, con nuestros gobernantes, con nuestros jefes, con nuestros subordinados, con nuestro país, les estamos enseñando cómo condenar a otros y es más, asegura Dorothy, podemos enseñarles a condenarse a ellos mismos.

Esta, asegura Dorothy, es una excelente manera de destruir su autoestima y el respeto por los demás. ¿De quién depende que esto no ocurra? De nosotros, los padres, que tenemos que aprender a no actuar así, pero también de la comunidad, añadiría yo. Si la comunidad regiomontana es una comunidad que le encanta la crítica y esto se refleja en la radio, en la televisión y en los periódicos, entonces no nos debemos de extrañar de la actitud de nuestros jóvenes.

2.- Destaca también que si los niños viven en un ambiente hostil, ellos aprenden a pelear. Desde luego este ambiente hostil se puede presentar de diferentes maneras: un ambiente hostil en la casa debido a los conflictos entre los papás, pero también el ambiente hostil que puede generar el que los niños pasen cientos de horas frente a la televisión viendo películas o caricaturas en las que se presentan imágenes de violencia. Recuerde que la violencia polariza la actitud de los niños marcándolos muchas veces para toda la vida, volviéndolos agresivos o marcándolos con una actitud de evitar los conflictos a como dé lugar.

3.- Asimismo, también la autora distingue que si los niños viven con temores y miedos, ellos aprenden a ser agresivos. Desde luego, asegura Dorothy, a los niños les encantan las historias de miedo; pero vivirlo en carne propia y continuamente los vuelve agresivos e inseguros.

Así que, estimado lector, atienda los temores y miedo de sus hijos entendiendo que lo que para ellos es muy importante, a usted le puede parecer intrascendente.

Yo todavía recuerdo vivamente el miedo que sentía cuando jugando en la calle, frente a mi casa en San Antonio de las Alazanas, se acercó una camioneta, de seguro a preguntarme algo, y no sé por qué vino a mi mente que me iban a secuestrar y sin mediar palabra salí corriendo hacia los brazos de mi mamá. Duré más de un mes teniendo pesadillas

¿Porqué tanta prisa por crecer?


En estos tiempos pareciera que ser niño es algo humillante.

Y eso que esa etapa es una de las más cortas de nuestra existencia, tomando en cuenta que, según datos recientes de la Organización Mundial de la Salud, en la actualidad, el promedio de vida en el ser humano anda alrededor de los 74 años.

La niñez cada vez se acorta más; antes podíamos decir que una persona de 12 a 15 años era aún un niño, pero ahora le llamamos “preadolescentes” o “adolescentes”. Entonces, si la niñez empezara a nuestros 4 años donde más o menos empezamos a tener "conciencia" de las cosas, y acabará a nuestros 11 años, y tomáramos en cuenta el promedio de vida como 74 años, el porcentaje de nuestra etapa infantil sería sólo de 11% del total de nuestra existencia. ¡Realmente poco! Y con nuestra tendencia actual, éste porcentaje tiende a reducirse aún más.

Pero, ¿porqué ésta prisa por crecer?

La mayoría de los adultos guardamos en nuestros recuerdos momentos felices.… la mayor parte de ellos vividos cuando aún éramos niños, sin preocupaciones y comúnmente sin más deber que asistir a la escuela, hacer tareas y tender nuestra cama. Pasábamos horas recorriendo el jardín en busca de chapulines y flores, jugábamos guerritas de agua con nuestros amigos, nos sentábamos por hooooras a platicar con nuestro mejor amigo, bailábamos y cantábamos toda la música infantil de nuestra época, organizábamos “obras de teatro” con nuestros amigos, jugábamos a las escondidas, y después de estar toda la tarde jugando lo único que queríamos era disfrutar de la rica cena que mamá o la abuela nos tenían lista.

Las niñas, aunque estuvieran un poco grandecitas, todavía jugaban con sus muñecas y casitas, y los niños andaban en la calle jugando pelota o patinando con sus amigos.

La idea de algún noviazgo no pasaba por nuestra cabeza, eso era para los “grandes” de más de 18 años….

Ahora, todo es diferente. Desde que el niño empieza a tener 11 o 12 años, ya no se siente bien teniendo fiestas infantiles con globos y concursos, aunque él sí lo siga disfrutando. Pero ¿que dirían sus amigos si supieran que para él su máxima diversión es el juego de las sillas musicales? ¡No, que verguenza! las niñas se desprenden de sus muñecas como si éstas estuvieran contaminadas con algo horrendo, porque ellas ya están “grandes”…. ¿ir a un parque con papá y mamá para jugar a la pelota? ¡Impensable, eso es para bebés!. Y si uno ve sus cuartos, no podrá encontrar ni con lupa un “juguete” sea cual sea, que no se parezca a un mp3 player o un videojuego de moda.

Y… ¿quién tiene verdaderamente la culpa de todo esto? Los padres, claro, porque muchas veces no se toman el tiempo para estar con su hijo y prefieren que sea la televisión la que los eduque. Siempre están tan cansados, que lo que menos desearían en un fin de semana es ir al parque con sus hijos para practicar el béisbol o el fútbol, porque ya tienen planes de dormir todo el fin de semana o reunirse con sus amigos.

Quieren ver a sus hijos realizados, y por ello desde pequeños les motivan a defenderse, a exigir sus derechos, a ser los mejores, y con ello, a presionar a sus hijos para que no pierdan el tiempo y crezcan cada vez más rápidamente. Les dan regalos costosos porque quieren demostrarles cuánto los quieren y entonces el niño, desde pequeño se vuelve exigente y difícil de complacer porque a corta edad ¡ya lo tuvo todo!: teléfono, televisión, celular, aparatos sofisticados de sonido, potentes computadoras, y hasta autos. ¿Para qué ese muchacho desearía seguir siendo niño? Si conforme va creciendo, se puede comer el mundo a mordidas mas grandes. Pero tristemente también, el mundo se va volviendo cada vez más “aburrido”. O, ¿quién no conoce a un “adolescente” que se queja de que está aburrido cada 5 minutos?

Pensemos entonces nosotros los padres, en tratar de devolverle a la niñez esos años que poco a poco se le han ido robando…. Fomentemos en nuestros hijos los gustos por las cosas sencillas, cálidas, y que disfruten verdaderamente de las personas, no de los aparatos modernos. Enseñémosles la magia de recortar muñecas de papel y vestirlas, de pintar un dibujo con lápices de colores, de jugar al “capeado” con la pelota, de salir a caminar y platicar, de explorar nuestro jardín y descubrir tantas cosas sorprendentes.

Enseñémosles a nuestros hijos a hacer pasteles, a jugar a inventar canciones, explíquenles que no tiene nada de malo que juegue con sus hermanos o amigos con sus juguetes como globos, muñecas, o carritos, dejémoslos hacer “casitas” debajo de las mesas o atrás de los muebles, y sobre todo, respetemos esos momentos de juego como sagrados porque son los momentos que más recordarán durante su madurez, que durará mucho más tiempo del que uno desearía.

Abrázemosles mucho, que nunca carezcan de nuestro cariño.

Para los papás buena onda...


... Y también para los que no lo son.

Responsabilidad. honor, vergüenza, respeto, principios elementales.

Bueno, pero... ¿Qué nos pasa? ¿Qué es lo que nos hace suponer, que alguien más tiene la responsabilidad de cuidar de nuestros hijos, si nosotros, que se supone que somos los que más los amamos, no queremos tomar esa responsabilidad?

Es ridículo ver esas mesas redondas, en las cuales funcionarios públicos, dueños de bares y discotecas, miembros de comités ciudadanos y medios de comunicación se culpan unos a otros por algo que no es más que falta de responsabilidad de nosotros los padres.

Que si en los bares le venden alcohol a menores; que si los agentes de tránsito reciben sobornos,
que si no cierran estos lugares a la hora señalada
que los jóvenes salen de estos lugares "totalmente borrachos"

¿Pero en dónde están los padres de éste menor que tomó más de la cuenta?
¿Quién lo recibe en su casa a esas horas y en ese estado?
¿Quién le dio el dinero para entrar en el bar, para el alcohol y para el soborno?
¿Dónde están los padres que le dieron el carro a un menor que no es capaz de hacerse responsable y manejar aunque esté tomado?

¡Por favor! ¿En qué piensan los padres de esos jóvenes que salen de su casa a las 11 de la noche, habiendo empezado a tomar desde la tarde, durante el partido de futbol?

¿Y qué están pensando los padres de la jovencita de 15, 16 ó 17 años, que va a conseguir raid de regreso con la mamá de fulanita, sin querer enterarse de que esa mamá ni siquiera está en la ciudad?

¿Por qué queremos pasarles la responsabilidad de decidir en manos de quién ponen su vida, si todavía no son capaces de decidir de que color pintarse el pelo, hoy con rayitos, mañana mejor negro o rojizo?

¿Por qué les damos permiso a nuestras hijas de irse a dormir después de la disco a casa de una amiga y les cargamos la responsabilidad de llevarlas a los novios de 19 ó 20 años, quién sabe a qué hora y no sabemos ni cómo, pues puede ser que tome de más?

¿Porqué queremos creer que son maduros y responsables si nosotros mismos no lo estamos siendo?

Nos volvemos ciegos a los peligros por comodidad, nos hacemos los "buena onda", "es que yo sí le tengo confianza a mi hija", "yo si confío plenamete en mi hijo".

Lo que tenemos es miedo y flojera, no queremos actuar como padres.

Nuestros hijos no necesitan que seamos sus compas... Ellos ya tienen un montón de amigos, de su edad. Seamos sus verdaderos amigos, preocupémonos por ellos.

Nuestros hijos necesitan padres valientes y responsables, que fundamenten principios basicos, que pongan reglas y luego estén ahí para ver que se cumplan.

¿Cómo va a depender la seguridad de mi hijo del barman de un antro o del agente de tránsito, o si dueño de la disco no cumple la ley y cierra a las 6:00 a.m. en lugar de a las 3:00 a.m.?

Yo creo que sí debería de haber un horario, "pero el que los padres pongan en su casa" independientemente de la hora que cierren los antros.

¿De qué tenemos miedo, papás?, ¿de que nuestros hijos nos odien?
¿Por qué no podemos poner reglas?, ¿Por temor a que ni nosotros las cumplamos?
¿Porqué no podemos exigir que se cumplan?, ¿Porque debemos darle su libertad?
¿Porque abandonamos a nuestros hijos? ¿por buscar nuestras propias comodidades?,

Si los jóvenes no necesitaran guía, si no necesitaran límites, ni autoridad a quién respetar...
no existiríamos los padres.

Se nos encomendó una misión muy especial, la más grande: la formación de una familia y es a nosotros a quien se nos pedirá cuentas por nuestros hijos; no al dueño del bar, ni al amigo de nuestro hijo que iba conduciendo borracho cuando chocaron y desgraciadamente falleció, ni al novio que se esta luciendo de lo rápido que maneja y lo bien que "controla" el auto aún estando borracho, ni al policía, ni al maestro...¡a nadie más!

Nunca, nadie podrá hacer que nuestros hijos regresen a casa a tiempo y a salvo, si nosotros no podemos hacerlo.

No existe ley, ni horario, ni funcionario capaz de hacer por nuestros hijos, lo que nosotros no queremos hacer.

¡ACTUAR COMO PADRES ES MUY DIFICIL!
¡NADIE NOS ENSEÑÓ A SER PADRES!
¡Y MUCHO MENOS A SER UNOS PADRES IDEALES!

No estamos en campaña de elecciones para ser el papá más popular del año, pues ya cada quién tiene el padre que le tocó y sería estúpido poner en peligro la seguridad de nuestros hijos por quedar bien y caerles bien a sus amigos y aún más estúpido utilizar a nuestros hijos como instrumentos de venganza hacia nuestras fallidas relaciones en esta época de tantos padres divorciados.

Es horrible oír de muertes de muchachos así, que han tenido la desgracia de toparse con esos otros jóvenes, hijos de padres "buena onda". Incluso oír de muertes de niños por accidentes o asesinatos que no han estado al cuidado de su papá y/o mamá.

Es increíble ver a los niños(as) jugando SOLOS en la calle sin ningún cuidado y es increíble ver a nuestros jóvenes metidos en los antros durante todo el fin de semana tomando y en muchas ocasiones drogándose ya sea por voluntad propia y/o propiciados por tanta gente sin moral y sin escrúpulos

No estaría mal ganarnos el respeto de nuestros hijos, tomando las riendas de su vida, haciéndonos responsables de su hora de llegada, de lo que toman, de sus calificaciones, haciéndoles saber lo que esperamos de ellos y creando los medios para ayudarles en su lucha para conseguirlo.

Pongamos los pies en la tierra, seamos concientes.. .

Los jóvenes y niños, lo único que necesitan, es que ACTUEMOS COMO PADRES !!!

"SOCIEDAD MEXICANA DE PADRES MALOS"
PERO QUE QUEREMOS A NUESTROS HIJOS
¡¡¡ÚNETE A LA CAMPAÑA!!!.